De la Casa del Correo al final de Vara de Rey

Cuando Facundo Martínez Zaporta y su familia fundaron La Rioja, administración, redacción y talleres se instalaron en la Casa del Correo (1889-1890), situada en la entrada de Portales, en lo que hoy ocupa la plaza Amós Salvador. Fue una sede con vocación efímera, pues pronto necesitó el diario más espacio para acoger toda la maquinaria que era pertinente. La Casa del Correo fue derribada poco después y, además de la citada plaza, se levantó el edificio que alberga el actual Ateneo Riojano.

Calle Sagasta (1890-1914)

Tras su apertura para comunicar la estación del ferrocarril con Bodegas Franco Españolas y otras empresas situadas junto al río Ebro, la recién bautizada calle Sagasta se convirtió en 1890 en la segunda sede del periódico, con mucho más espacio para los talleres, que conformaban la parte más voluminosa de la empresa. Sagasta fue, entre las últimas décadas del siglo XIX y las primera del XX, el centro comercial y social de Logroño, junto a la calle del Mercado (hoy Portales).

Plaza de la Imprenta (1914-1968)

Como llevaba La Rioja llevaba más de dos décadas como una empresa consolidada y líder en el sector de la prensa, los Martínez Zaporta invirtieron en una nueva sede, que serviría también como domicilio familiar, además de contar con un café y con un teatro. El proyecto contempló toda una manzana, cuya plaza se bautizó de la Imprenta, pues en uno de los callejones medievales tuvo su taller Guillén de Brocar. Años más tarde, sería dedicada a Francisco Martínez Zaporta.

Vara de Rey (1968-2019)

El último traslado, hasta hoy, se produjo en el año 1968, cuando finalizaron las obras en la calle Vara de Rey, junto a la novedosa trinchera del ferrocarril, en la zona sur. Fue una acertada apuesta por el nuevo Logroño que se estaba forjando y que, décadas más tarde, sitúa la sede de La Rioja en el centro de la ciudad, con espacio para albergar, además del diario, a larioja.com y a TVR.