De prosperar en los mismos términos el borrador de sentencia del Tribunal Constitucional sobre la financiación de los centros que segregan por sexo, el plan en el que trabaja el Ejecutivo riojano para suprimir el concierto con el colegio Alcaste tendría un recorrido muy corto ... y pocas o ninguna posibilidades de salir adelante.
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El tribunal, que está previsto que debata mañana el texto de la sentencia, da en parte la razón a Vox que recurrió la Lomloe, también llamada Ley Celáa, y plantea que se declare inconstitucional el veto a financiar con fondos públicos a los colegios que separan a los niños y niñas en aulas separadas.
Entre otros argumentos, el borrador de fallo, que lleva el sello del magistrado Ricardo Enríquez, sostiene que por encima de los planes del Gobierno sobre el diseño de los modelos educativos que puedan obtener subvención están el criterio de los padres y el principio de libertad de educación. Por tanto, si la sentencia se dicta finalmente en los mismos términos, los conciertos deberán extenderse obligatoriamente a cualquier colegio al margen de su proyecto educativo, incluso si optan por separar a niños y niñas en las aulas. De esta forma, los centros que segregan por sexo podrán reclamar su derecho a subvención sin que el Ministerio de Educación pueda hacer nada para evitarlo.
En La Rioja, el fallo del Constitucional afectaría exclusivamente al colegio Alcaste, el único en la región que divide a los alumnos en dos centros en función del sexo.
La supresión del concierto forma parte del acuerdo del Gobierno entre el PSOE, IU y Podemos-Equo. De hecho, en el último pleno en la Cámara autonómica la presidenta aseguró que su Ejecutivo trabaja para terminar con estos conciertos y con este fin ya habría realizado diferentes consultas al Ministerio de Educación y a los servicios jurídicos. La mandataria respondía así a una pregunta de la diputada de Izquierda Unida, Henar Moreno, sobre qué medidas iba a tomar para evitar que los centros concertados que segreguen por razones de género reciban fondos públicos.
El acuerdo, que en agosto de 2019 otorgó la Presidencia del Gobierno riojano a Concha Andreu, reza textual que «aquellos centros sostenidos con fondos públicos que no cumplan con la función social para las que son financiados, centros que segregan a los alumnos por condición de sexo y centros que no escolarizan a alumnado socioeconómicamente desfavorecido, perderán el concierto educativo», pese la literalidad del texto, el entonces consejero de Educación, Luis Cacho, descartó que el curso 2019-2020 fuera el de la ruptura con el colegio Alcaste.
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Un curso después, con nuevo inquilino en el antiguo edificio de la 'bene', la diputada de IUvolvió a recordar ese punto concreto del acuerdo de gobierno. La respuesta del consejero Pedro Uruñuela fue que había que esperar a la entrada en vigor de la Lomloe, que prohibe expresamente que los centros educativos que tengan un concierto separen a sus alumnos en función de su género. Con la nueva reforma educativa en marcha es ahora el órgano de garantías el que ha vuelto a poner freno al fin de la financiación con fondos públicos del colegio Alcaste.
No es la primera vez que el Constitucional responde en estos términos sobre los conciertos con colegios que segregan por sexo. En 2018, los magistrados del Alto Tribunal concluyeron que «el sistema es una opción pedagógica que no puede conceptuarse como discriminatoria».
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