De bien nacidos...

Pero, tal vez lo de menos era la placa, ya que Paredes se mostró en todo momento entusiasmado con pisar la tierra que vio nacer a quien fundase la ciudad donde él ha nacido y ahora dirige políticamente, una ciudad de más de 200.000 habitantes. El entusiasmo también quedó patente en su interés por departir con los pocos vecinos que pudieron acudir al evento, ya que, como dijo una de las allí presentes, «si se hubiera podido hacer esto un domingo, hubiéramos estado mucha más gente».

No pareció importarle mucho al intendente Paredes Urquiza que no hubiera mucha gente; él con lo que estaba feliz era con haber podido conocer el lugar de origen de Ramírez de Velasco. «La verdad es que es un orgullo para mí, como alcalde de La Rioja argentina, visitar el lugar donde nació el fundador de mi ciudad, don Juan Ramírez de Velasco, que la fundó un 20 de mayo de 1591. Es un honor, un orgullo, y era una de las tareas pendientes de mi vida. Estar en representación de mi ciudad es de mucho gusto para mí».

Sin duda, el fundador de la ciudad que lleva el mismo nombre que la provincia de la que es capital, dejó su impronta, ya que, según Paredes, «el palacio municipal sede del Ayuntamiento lleva su nombre y la montaña a cuyo pie está la ciudad también se llama Velasco». Por eso, por el cariño que profesan a su fundador, no descartaba la posibilidad de un hermanamiento entre ambos municipios.

Como muestra de agradecimiento, Paredes hizo entrega al alcalde de Estollo, Ángel José Lerena, de un mate de plata (recipiente en el que se toma la popular bebida argentina) y de una bandera de la provincia de La Rioja, al tiempo que obsequiaba con una escudo de la ciudad a la consejera de Presidencia, Begoña Martínez. Tras fotografiarse con los vecinos en grupo compartió un aperitivo regado con Rioja.