«El barrendero no puede con todo»

Llama para pedir más control en las duchas de las piscinas de Lardero. Lo dice porque «todos los veranos pasa lo mismo. Vas a entrar a las duchas y tienes a todo el grupo de chavales usándolas, tirándose una hora con el agua caliente a tope y jugando al fútbol. Ni se puede entrar del vapor que hay. Les llamas la atención y dicen que se lo van a decir a sus padres. O sea, que tienes que andar con mucho cuidado..., hay un descontrol absoluto», señala.

Llama para decir que es una vergüenza cómo está la Travesía San Lázaro de Logroño. Tiene –dice– hierbas y malvas de metro y medio y no escasean las zarzas. «El barrendero no puede con todo porque está todo de vergüenza. He llamado al Ayuntamiento para quejarme, pero da igual. Esto empieza a secarse y podría producirse un incendio cualquier día y prepararse un buen lío», advierte.

Entiende la lectora que ahora se han puesto los contenedores en María Zambrano y «da pena mirar. A rebosar, bolsas por los suelos, cartones...», dice y añade que cree que «el sitio idóneo para colocarlos es esa calle, no Bretón. Si se peatonaliza, Bretón no es para poner contenedores frente a un edificio anexo al teatro, con el paso que tiene y las terrazas. Pero, bueno, da igual la calle, el sistema de recogida es esquizofrénico e independientemente de la calle, está todo sucísimo. Es increíble el estado en el que está todo», subraya.

Llama desde Ponferrada para agradecer el evento de la Policía Nacional en la plaza de toros de Logroño. «Fue una experiencia que me gustó mucho».

'La Rioja, orgullosamente diversa', un lema que le gusta a la lectora. «Enhorabuena por el cartel del Gobierno de La Rioja me parece precioso, tanto por la fotografía como por el contenido de la frase, mi enhorabuena a los autores».

Urbano, desde Arnedo, que se reconoce como «paseante habitual», encuentra «un contrasentido que al entrar en la vía verde los peatones tienen que ir andando por la derecha mientras los ciclistas vienen por la espalda del caminante y tienen que pitar. Propongo que los peatones vayan por la izquierda como lo hacen en carretera. No entiendo por qué en la vía verde los peatones tienen que ir por la derecha cuando hay bicicletas».

«Lo que yo creía que era un defecto de fabricación resulta que es un artilugio para no diseminar residuos, pero no deja de ser un incordio porque el tapón se te queda en la nariz», relata y añade el último lector que, «entonces va uno con toda su mala leche, agarra el tapón, lo arranca y lo tira. Incluso puede que te tragues uno de los plásticos que se quedan ahí adheridos.Me parece una ocurrencia absurda. Que inventen cosas cómodas».