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El inicio de esta semana y la previsión para el resto de los días ya anunciaba que las tormentas podían complicar la circulación en las carreteras riojanas. Si el lunes quedó interrumpido el tráfico en la N-232 a la altura de Briones por ... las balsas de agua, esta imagen pudo verse de nuevo ayer. Desde SOS Rioja se advertía al principio de la tarde de estas acumulaciones de agua en la vía, esta vez, a la altura de Cenicero en la entrada a la autopista y en la propia carretera en el punto que une la localidad con Torremontalbo. Finalmente, a las 21 horas, la N-232 fue cerrada al tráfico en Briones para volver a abrirse pasadas las doce de la noche. Varias patrullas de Seguridad Ciudadana y de Tráfico de la zona informaron y auxiliaron a varios conductores afectados por esta situación, según informó la Delegación de Gobierno. Apuntaron, además, que no había ningún dato que indicara que había localidades aisladas ni daños personales tras estos incidentes.
La siguiente vía en la que las balsas de agua obligaron a que la Guardia Civil de Tráfico estuviera vigilante fue la LR-313, en Ollauri, donde en el primer momento se pidió precaución a los conductores, aunque finalmente los agentes decidieron el cierre, comunicado a SOS Rioja, por el desbordamiento del río que pasa por la localidad. Esta carretera también fue abierta al tráfico unas horas después, según las últimas informaciones de SOS Rioja de ayer miércoles..
Las últimas carreteras en sufrir el cierre de la circulación a causa del exceso de agua fueron la LR-314, entre Briones y Hormilla (del kilómetro 0 al 5), según informó la Dirección General de Infraestructuras, y la LR-124, entre Ábalos y San Asensio, donde varios equipos del Servicio de Conservación de Carreteras del Gobierno de La Rioja estuvieron limpiando la zona. La LR-208 de Hormilleja volvió a la normalidad entrada la noche.
A causa de un desprendimiento, tampoco se pudo circular por la LR-113, desde la Venta de Goyo hasta Mansilla. Tras los trabajos de limpieza el tráfico volvió a uno de los carriles después de las doce de la noche. También se cortó a causa de las inundaciones la LR-137, desde la N-232 a la entrada de la autopista y de Navarrete a la rotonda de Medrano. Al final del día, la LR-137 de Navarrete a Entrena continuó cerrada, así como el tramo de Navarrete a Fuenmayor, pero el acceso a la AP-68 quedó abierto desde Navarrete.
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