Justo Rodríguez

Los agricultores y ganaderos riojanos vuelven a advertir de que «están al límite»

Los profesionales admiten su «complicada situación» por la sequía, el incremento de los costes de producción y la reforma de la PAC

Jueves, 20 de octubre 2022, 02:00

Al límite, sin esperanzas ante el futuro inmediato y con una creciente incertidumbre en un sector cada vez más golpeado por todos los flancos. El agro riojano vuelve a lanzar un SOS que le permita sobrevivir.

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«Estamos en una situación muy complicada en cuanto ... a la climatología, porque llevamos arrastrando desde hace muchos meses esta sequía. La falta de agua ha afectado a prácticamente todos los cultivos, con recortes en la producción de entre el 35 y el 40% respecto al año pasado», resalta Óscar Salazar, presidente de UAGR, que recuerda que «ahora toca la siembra de los cereales, pero ponerte a sembrar ahora, según está la tierra y sin previsión de lluvias a corto plazo, es muy arriesgado, yo diría que ahora mismo es un riesgo inasumible».

A todo eso, el responsable de UAGR le suma «los altos costes de producción, a unos precios imposibles, los abonos, simientes, carburantes, energía... Y este año no nos los cubren los seguros. Y no podemos olvidar la reforma de la PAC, que cada vez que ha habido una ha sido injusta, pero esta es la peor de todas, porque se penaliza a los profesionales agrarios, a los que vivimos solo de esto».

Por ello, su diagnóstico no puede ser más pesimista: «Esta todo fatal y podemos entrar pronto en una crisis alimentaria que nos lleve a un desabastecimiento, que es a donde nos conduce la nueva PAC, a la no producción, porque muchos agricultores van a tener que abandonar su actividad».

Desde ASAJA, su presidente, Eduardo Pérez Hoces, coincide en la radiografía: «Todavía quedan cultivos por recoger, como la patata, la remolacha y ciertas variedades de manzana, pero en general se ha recogido ya casi toda la producción y por la escasez de lluvias se ha producido una merma del 40% en las cosechas». Tras admitir las dificultades y la incertidumbre de cara a la siembra de cereales, tampoco se olvida de los ganaderos, «porque ya vemos cómo está el monte, todo seco, y eso provoca un aumento de los costes de producción al tener que comprar piensos y forraje».

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Sequía, abono, simiente, gasóleo... «Está todo desorbitado y estamos en una situación complicada y el agricultor y el ganadero está al límite», concluye.

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