Aena invertirá 15,4 millones en un parque solar de 45.856 placas para autoabastecer al aeropuerto de Agoncillo

La sociedad pública ha proyectado la instalación de 45.856 placas que tendrán una potencia de 23,5 megavatios y se ubicarán en tres parcelas diferentes, ocupando 12,97 hectáreas de la superficie total del parque. El proyecto prevé también una línea soterrada de evacuación de la planta hasta su conexión a la línea de 66 kilovoltios de la red de distribución de 'i-DE' (Iberdrola) que enlaza las subestaciones de El Sequero y Logroño.

Según el calendario que maneja el gestor aeroportuario, los trabajos de construcción comenzarán en enero de 2024 y se prolongarán por espacio de 18 meses, por lo que deberán estar concluidos en julio de 2025. El periodo de pruebas individuales de los equipos se realizará ese mismo mes, en agosto se acometerán las pruebas y en septiembre de ese año la planta entrará en explotación.

La producción estimada asciende a 39,79 gigavatios-hora anuales, que evitarán la emisión de 4.695,7 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera. Una aportación nada desdeñable a los planes de descarbonización de la comunidad, pues se suma a la que esta misma semana presentaba Solarig para su planta de producción de hidrógeno verde en el polígono de El Sequero, que ahorrará unas 13.000 toneladas de CO2.

El complejo solar fotovoltaico del aeropuerto riojano se ubicará dentro de los límites de la instalación y estará formado por tres campos fotovoltaicos localizados en el noroeste. En detalle, uno de ellos estará situado al norte de la pista de vuelos y los otros dos al sur de ella, por lo que los trabajos de ejecución en horario diurno no afectarán a la actividad aeroportuaria.

Aena ha confirmado este jueves a este diario que la actuación en Agoncillo forma parte del Plan de Acción Climática 2021-2030 que la sociedad está desarrollando en diversos aeropuertos de España, entre ellos, Madrid, Barcelona, Mallorca, Fuerteventura y Reus. El objetivo es «lograr el 100% de autoabastecimiento energético a partir de fuentes renovables» en aquellos aeropuertos que cuentan con «disponibilidad de terrenos» y donde «existe garantía de un alto nivel de aprovechamiento solar debido a su ubicación geográfica».

El generador fotovoltaico, que es el dispositivo encargado de transformar la radiación solar en electricidad, estará formado por 45.856 módulos de silicio monocristalino conectados en serie, que se instalarán en sentido vertical formando dos filas sobre la estructura soporte, con orientación sur e inclinación de 30 grados. La cara frontal de cada módulo solar será una placa de vidrio templado transparente.

La energía generada en la planta se transportará a lo largo de los terrenos del aeropuerto mediante canalizaciones enterradas casi en su totalidad.