«La administración no propone ubicaciones pero sí puede limitar las instalaciones»

Dorado señaló que el 49% de la energía producida en La Rioja es de fuentes renovables con datos de 2019 [el 60% en 2020, aunque fue el año de la pandemia] y que para 2030 el compromiso legal es llegar al 74%.

Asimismo, recordó que la administración tiene la «obligación de admitir a trámite todos los proyectos que se presenten en tiempo y forma, lo que no quiere decir que se lleven a cabo». En este sentido, recordó que ya han rechazado dos proyectos (los parques eólicos de la Aldea y Aldealobos) y que han presentado alegaciones a varias líneas de evacuación de alta tensión: «Hay 24 proyectos, veinte fotovoltaicos y cuatro eólicos que están en tramitación en La Rioja, lo que no quiere decir que se vayan a llevar todos a cabo». A estos, en todo caso, habría que sumar los que afectan a más de una comunidad autónoma o que superan los 50 MW de potencia, que los tramita directamente el ministerio.

Dorado se ganó también las críticas de los partidos de la oposición, que insiste en reclamar una planificación ordenada, al asegurar que hay «mucha desinformación sobre este tema» y que «no es momento para negacionismos».

El consejero sí quiso dejar claro que la producción de más energía renovables es una prioridad irrenunciable de su departamento y aclaró que «ni el Gobierno de La Rioja ni el de España somos promotores de las iniciativas, por lo que no podemos determinar las ubicaciones, pero sí somos los garantes para que sean compatibles con los valores naturales».

Dorado insistió en que «es posible limitar la instalación de energías renovables mediante el establecimiento de espacios naturales protegidos y mediante la ordenación del territorio» y avanzó que «en ello estamos trabajando ampliando el territorio de Red Natura 2000 y la protección de otros tipos de suelos y paisajes».