Los abogados animan a reclamar porque «siempre hay que defender los derechos»

«El lunes gestioné tres reclamaciones extrajudiciales, el martes otras cuatro... Diariamente están entrando», explica el abogado Iñaki Añorga. «Podemos hablar de que llevamos un tiempo con al menos una demanda por gastos hipotecarios al día», reconoce la también letrada riojana Verónica Yécora. Son dos ejemplos de togados particulares, pero no faltan las asociaciones, entidades de consumidores... que se han convertido en la vía de reclamación para un buen número de españoles (y riojanos) que llevan años peleando por reclamar lo que la Jurisprudencia ha reconocido como abusos de la banca.

«Siempre merece la pena reclamar por defender nuestros derechos», explica Añorga. «Si el cliente no gana, nosotros tampoco y, además, las sentencias en su gran mayoría están condenando a costas a los bancos», incide. «Se están consiguiendo, en el caso de una hipoteca de 120.000 euros, unos 800-900 euros por cliente en relación a los gastos de notaría, registros... Si se incluye la comisión de apertura la cantidad sube más. Y también es importante señalar los intereses», incide Verónica Yécora, de Compañía Jurídica. Porque hay contratos de compraventa firmados hace dos décadas. Y ese dinero que ahora se reclama tiene que ir acompañado de los «intereses legales desde las fechas de los respectivos pagos por el demandante», como reza un reciente fallo emitido por la Audiencia Provincial de Logroño.

Añorga diferencia entre hipotecas aún vigentes y las ya extintas. En el primer caso, además de los gastos hipotecarios también se deben reclamar aspectos como la cláusula de demora. En las ya pagadas, también se puede exigir la devolución de esos gastos iniciales teniendo en cuenta los plazos. «No hay pegas legales para solicitarlo. Eso sí, con la hipoteca ya pagada, no se puede pedir la nulidad de otras cláusulas», analiza Añorga.

Este abogado recuerda también que en La Rioja se firmaron un gran número de 'Hipotecas Joven', en la que había conceptos que asumía el Gobierno regional, pero el resto de gastos de notaría, gestoría... se aplicaban a los prestatarios. En estos casos también se puede reclamar judicialmente. Incluso muchas entidades financieras han comenzado a 'allanarse', que no es otra cosa que acceder a la petición del cliente sin llegar a los juzgados.