«Mi objetivo es hacer a Andreu presidenta»

- ¿Prefiere tener contrincante en las primarias? ¿O le hubiera gustado concurrir en solitario?

- Yo creo que la competencia siempre es buena. Entre otras cosas, porque para eso están las primarias, para que haya confrontación de modelos y la militancia pueda elegir. Sobre todo, en estos momentos. Porque se ha demostrado en los procesos internos recientes que los militantes tienen ganas de participar. Bueno, pues ahora van a poder elegir, también en el PSOE de La Rioja. Y yo intentaré convencerles de que mi candidatura es la mejor opción. Que el proyecto que presento es el mejor para nuestro partido.

- ¿Cuándo tomó la decisión de presentarse? Me refiero al minuto decisivo, cuando por fin observa que hay agua en la piscina.

- En realidad es una decisión muy meditada y también muy compartida. Sobre todo, con Concha Andreu. Hemos estado siempre codo con codo y también en esta decisión lo hemos estado. Íbamos hablando, lo comentaba con otros compañeros y finalmente llegas a la conclusión de que es la mejor decisión, aunque la verdad es que el momento de tomarla es reciente. Hace sólo unos días.

-¿Y de dónde nace ese impulso?

- Bueno, es una idea que vas madurando. El momento clave es cuando observo que el liderazgo de Andreu es indiscutido. Que su proyección institucional está ya consolidada, social y políticamente. Entonces ves que ese es el momento. Porque de este modo, si gano, ella queda liberada de la gestión diaria del partido. Yo me puedo hacer cargo de esa tarea y Andreu puede proyectarse hacia el objetivo que nos une a todos los socialistas. Sobre todo, ahora que ha alcanzado esa visibilidad que le otorga su nuevo cargo en Ferraz. Mi objetivo es que Concha Andreu, que ya es nuestra líder social, sea la próxima presidenta de La Rioja.

- Lo cual significaría recuperar aquel viejo modelo de bicefalia entre Ángel Martínez Sanjuán y José Ignacio Pérez Sáenz.

- ¿Bicefalia? No, para nada. Todos los modelos son diferentes. Si yo ganara, tampoco ahora sería exactamente así, porque hay que recordar que entonces Ángel Martínez Sanjuán ocupaba un escaño en Madrid. Lo cual no es mi caso. Yo sigo en el Parlamento de La Rioja. Y en todo caso me debo a mis compañeros, prefiero hablar de un liderazgo compartido. A mí me gusta mucho ese verbo, compartir. Y quiero compartir mis ideas con las cabezas bien amuebladas que hay en nuestro partido. Este proyecto no es cosa de uno ni de dos. Es compartido.

- ¿Y con César Luena consultó su decisión? ¿Hay algún pacto tácito para preservar su escaño en el Congreso si es usted secretario general?

- Es que... (Paréntesis largo). De César Luena se dicen tantas cosas, le cuelgan tantos sambenitos... Cualquiera que conozca el partido sabrá que no es así, porque quien quiera ser candidato a Cortes tiene que ganarse antes el favor de la militancia, ganar las primarias. No hay trapicheos bajo la mesa. Y sobre César sólo puedo decir lo de siempre: que ha sido extremadamente respetuoso con los procedimientos internos. Ha sido un honor ser su número dos pero yo tengo ideas propias.

- ¿Por ejemplo?

- Por ejemplo, adaptar el modelo del partido en La Rioja al que sale del congreso del pasado fin de semana en Madrid. El PSOE del 2017 no es el PSOE del 2012. Hemos pasado por una etapa de oposición a la mayoría absoluta del PP, ahora estamos en una etapa con un Gobierno del PP en minoría... Esto es una carrera ciclista: hay que superar distintas etapas. Hace un par de años, cuando recorría La Rioja pueblo a pueblo contando que el PP iba a perder la mayoría absoluta, muy poca gente me creía. Ahora digo que el próximo presidente del Gobierno de La Rioja será una mujer, Concha Andreu. Tenemos todos los mimbres para conseguirlo aunque el objetivo principal es otro: mejorar la vida de la gente. Demostrar a los riojanos que hay otra manera mejor de hacer política, distinta por completo a la manera del PP.

- Gobernar implica ser una oposición creíble. ¿Está satisfecho con la gestión del PSOE en ese ámbito?

- Sí, claro. Todo es mejorable pero estamos contentos. Ahora nos disponemos a pasar a una segunda escala: de la proposición no de ley a la proposición de ley. Llega la hora de una nueva manera de hacer oposición en el Parlamento de La Rioja. Construir mayorías para reformar leyes más injustas del PP. Ser capaces de darle la vuelta a las políticas del PP.