María Félez
Miércoles, 7 de junio 2017, 23:05
Hace ahora 45 años un accidente de aviación conmocionó la localidad de Autol. Un Phantom F-4 se estrellaba en los montes de la sierra de Yerga y en él fallecían sus dos tripulantes, los capitanes Johan Boesse y Ralen Travis. El accidente tuvo lugar ... cuando el avión sobrevolaba en compañía de otros tres aparatos los montes de la zona. Por causas que no llegaron a hacerse públicas, el aparato se separó de la escuadrilla, se incendió y se vino abajo. Uno de sus ocupantes trató de saltar en paracaídas, pero encontró la muerte al igual que su compañero, que permaneció en todo momento en el interior de la nave.
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Ahora gracias a un camino de 5,5 kilómetros que se ha abierto en Yerga para poder acceder a las zonas más complicadas en caso de incendio han salido a la luz nuevos restos de aquella nave americana.
Juan Martínez era el guarda mayor de la zona en aquella época. Él recuerda a la perfección ese día. «Era más o menos esta época porque me acuerdo de que había gente cogiendo espárragos esa mañana», comienza su relato.
Estaba por Yerga cuando vio caer el avión. «Estaría a medio kilómetro o así y enseguida pude acceder a la zona», continúa. «La cabina del avión llegó hasta allí», señala, «me encontré al piloto envuelto en llamas».
Le echó tierra encima para intentar apagar las llamas. «El traje que llevaba debía ser ignífugo porque estaba como nuevo pero se notaba que el chaval estaba muerto, me iba a acercar hasta donde estaba el piloto pero como el avión estaba lleno de munición empezaron a explotar algunas balas y me asusté, así que decidí quedarme en la zona», relata.
«Se veían sobrevolar habitualmente esos aviones americanos», nos cuenta. «Decían que eran de la guerra de Vietnam que venían a hacer maniobras a la zona de las Bardenas».
Esos días los americanos inundaron Yerga en busca de pistas para averiguar las razones del accidente, incluso llamaron a Juan para que relatase lo que había visto. «Se llevaban trozos como coches», explica. Ahora vuelven a salir, de menores dimensiones, todavía en el monte.
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