Panorámica del nuevo nudo de comunicación que interconecta en Recajo la autopista AP-68, la N-232, la circunvalación LO-20 y la Autovía del Camino A-12 en Navarra.

Un enlace a punto de conectar

Las obras del nudo de Recajo están prácticamente finalizadas a la espera de recepción

Javier Campos

Lunes, 8 de mayo 2017, 21:37

«Prácticamente acabadas a falta de los últimos retoques necesarios y previos a su recepción y posterior apertura o puesta en servicio». Las obras del nudo de Recajo, según informó a Diario LA RIOJA el propio Ministerio de Fomento, son ya una ... realidad a falta de detalles de última hora. Desde hace ya algunos días es fácilmente comprobable el resultado definitivo de la construcción de un enlace completo para la conexión de la N-232 y la autovía LO-20 (circunvalación de Logroño) con la autopista AP-68 en Recajo que permite conectar, de la misma manera, con la A-12 o autovía del Camino.

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Las mismas fuentes ministeriales precisaron que los trabajos de última hora serían tales como «la puesta de los hitos de deslinde, el tratamiento superficial de los caminos, el remate de los ramales y el cerramiento y las rampas de escape de los animales, entre otras actuaciones finales». Desde la propia Delegación del Gobierno en La Rioja confirmaban que los trabajos técnicamente han finalizado quedando pendiente la recepción de la obra por parte del Gobierno de España cuando «reciba el visto bueno de los técnicos» y añadían, por su parte, que esperan que el 'OK' llegue este mismo mes de mayo.

En cualquier caso, el fin de obras se demorará algo sobre el último plazo previsto anunciado a finales del 2016 coincidiendo con la visita del entonces ministro de Fomento, Rafael Catalá, cuando se habló de su entrada en servicio a lo largo del primer trimestre de este 2017. Ya ahí, y pese «al febrero o marzo» sostenido por el exministro, fuentes técnicas explicaron a este periódico que la apertura se retrasaría ya que había que construir dos pasos elevados sobre la autopista para resolver el movimiento del tráfico desde la LO-20 en dirección Zaragoza y desde la autopista hacia la circunvalación.

16 millones de euros

El nuevo nudo de comunicación ya se encontraba recogido dentro del convenio suscrito el 15 de marzo del 2010, entre la Administración General del Estado y la Autopista Vasco-Aragonesa. El presupuesto de las obras es de 13,50 millones de euros, si bien la inversión total de la actuación, incluidas las expropiaciones, la redacción del proyecto y el control y vigilancia, ha ascendido a los 16. Una infraestructura -«nuevo candado» en el sentido de 'nuevo peaje', según denunció en su día el PSOE- que se enmarca dentro del proyecto que convertirá el tramo Navarrete-Arrúbal de la autopista en la futura ronda sur de la capital -y que salió a exposición pública el pasado enero-.

El nuevo enlace parte de la glorieta sur del enlace de Recajo ya existente con la LO-20 y la N-232. A partir de esta glorieta se dispone de un ramal de conexión que da acceso a la nueva playa de peaje desde la cual nacen el resto de ramales que sirven a todos los movimientos de conexión con la autopista AP-68.

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Asimismo, se han construido dos estructuras de 87 y 142 metros de longitud, respectivamente, para permitir el cruce sobre la autopista de dichos ramales y se han restituido los caminos interceptados ampliando el actual paso inferior bajo la AP-68 y construyendo uno nuevo bajo los ramales.

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