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María Félez
Lunes, 20 de febrero 2017, 01:06
Después del incendio que se cobró la vida de un calagurritano el pasado domingo en la cuesta de la Curruca y un segundo fuego que tuvieron que sofocar el viernes los bomberos en la misma calle, ayer se registraba un tercer siniestro en la localidad.
Poco antes de la una del mediodía comenzó a arder una vivienda de las 1.175 deshabitadas que hay en el casco antiguo de la ciudad. Hasta la zona se desplazó una dotación de Bomberos y agentes municipales hasta que se sofocó el fuego. La vivienda da a las calles Los Sastres y San Andrés y, según pudo saber este medio por los vecinos de la zona, «en ocasiones estaba ocupada por dos personas», aunque en el momento del incendio no se encontraban en el inmueble. Los bomberos tuvieron que alargar sus trabajos hasta bien entrada la tarde por problemas serios con la estructura de la vivienda y, de hecho, se teme por su derrumbe,
De momento se desconoce el origen del fuego, aunque desde el parque de servicios de Calahorra detallaron que el inmueble también era frecuentado por grupos de jóvenes que lo ocupaban aprovechando que se encontraba deshabitado. El techo del edificio, un bajo más tres plantas, se vino abajo, sin daños personales. Las consecuencias hubieran sido peores si en ese momento se hubieran encontrado ocupadas las casas colindantes.
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