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la rioja
Viernes, 16 de diciembre 2016, 09:49
Había vendas, gasas, apósitos, tiritas, botiquines completos, incluso mascarillas quirúrgicas. Y también cosméticos y productos de limpieza: pintalabios, cremas de cara, contorno de ojos, productos de limpieza del hogar, tintes para ropa, quitamanchas, ambientadores y pegamentos. Todos ellos deberían haber sido destruidos hace tiempo, ... porque estaban caducados en algunos casos hace años. Pero una red delictiva hizo que, en lugar de ser eliminados, acabaran en una nave de Calahorra, en el polígono Tejerías Sur, de donde debían salir para ser revendidos en mercadillos y puestos de venta ambulante españoles, o también en países como Rumanía y Mauritania.
La Guardia Civil ha inmovilizado nada menos que 32 toneladas de productos caducados, e investiga por su participación en la red criminal a cinco personas, tres de ellas residentes en Cataluña (de donde procedían los productos) y otros dos en Calahorra. Todos ellos podrían haber incurrido en un delito contra la salud pública, porque la salida al mercado negro hubiera supuesto, dice el instituto armado, "un grave peligro para la salud de los consumidores".
Según los investigadores, los productos procedían de una nave industrial en Vilamalla (Gerona). Al parecer, los productos estaban en manos de una empresa de gestión de recursos tóxicos y peligrosos que tiene sede en Barcelona, y que debía haberse ocupado de su destrucción. Sin embargo, en lugar de eso los vendió a otro de los implicados en esta investigación, con la intermediación o la ayuda del resto. Y así acabaron en la nave de Calahorra donde, además, estaban almacenados de un modo muy peligroso, junto con otros productos "altamente inflamables, corrosivos e irritantes".
De allí debían salir con destino a los puntos de venta. Algunos de ellos ya habían salido: la investigación de la llamada "Operación Empicol" ha llevado hasta un bazar de Bilbao, en el que ya había una "gran cantidad" de artículos de cosmética caducados que han sido precintados.
Además, los productos estaban almacenados de un modo muy peligroso, porque se encontraban mezclados y almacenados junto a diferentes productos químicos altamente inflamables, corrosivos e irritantes.
Los implicados son una mujer de 71 años de edad, natural y vecina de Bilbao, dos varones de 65 y 35 años, naturales de La Rioja y vecinos de Calahorra, y otros dos varones de 48 y 66 años, de nacionalidad española y residentes en Barcelona y Figueras (Gerona).
En la "Operación Empicol", en marcha aún en La Rioja y Cataluña, ha colaborado también la Consejería de Salud de la Comunidad Autónoma de La Rioja (Dirección General de Prestaciones y Farmacia).
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