Pérez Pastor y Arruga se perfilan para relevar a Cuevas en el PP y el Parlamento

En el caso del hemiciclo, se da por hecho que el relevo de Cuevas como voz principal será Concepción Arruga. Todo indica que el partido no 'correrá' la estructura de cargos acordada al inicio de la legislatura y mantendrá como portavoces adjuntos a Jesús Ángel Garrido y Raquel Sáenz. En vez de reforzar sus responsabilidades, el partido optará por dar las riendas del grupo en la Cámara a la anterior consejera de Administración Pública y Hacienda, lo cual arrastrará a su vez nuevos movimientos en cuanto a las liberaciones. De las tres a las que tiene derecho el PP -47.208 euros anuales por cada una de ellas- sólo ha asignado una hasta ahora, precisamente en la persona de Arruga después de que la correspondiente a Emilio del Río también quedara vacante tras su marcha al Congreso de los Diputados. El ascenso de la exconsejera como portavoz le reportará la retribución estipulada para su rango -52.452 euros- y dejará en manos del grupo decidir si libera económicamente a algún diputado en su sustitución.

Queda por decidir el cómo y el cuándo. Aunque nada más conocerse la designación de Cuevas, C's se apresuró a exigirle renunciar a su liberación en cumplimiento del punto del acuerdo entre PP y Ciudadanos sobre incompatibilidad de sueldos y dietas, el ya consejero de Fomento inscribió este lunes su próxima desvinculación en la normativa que impide percibir dos retribuciones aunque éstas provengan de administraciones distintas. A ello agregó la dedicación que exige en esta legislatura el cargo de portavoz en una Cámara donde las relaciones entre los cuatro partidos se han multiplicando tras la ruptura de 20 años de mayoría absoluta.

La única duda estriba así en cuándo se formalizará el nombramiento de Arruga como nueva portavoz. El grupo parlamentario popular no había tramitado a fecha de ayer el relevo en el registro y, por otro lado, el propio Cuevas adelantó que en el próximo pleno previsto para el día 31 ya no estará al frente del PP en el hemiciclo. Mientras se cumplimenta el paso, serán Garrido y Sáenz quienes lleven las riendas de la actividad ordinaria.

Un nuevo perfil

El impacto del cambio de funciones de Carlos Cuevas será especialmente relevante en clave interna para el PP dado que afectará de forma directa a la Secretaría General que ostenta desde noviembre del 2004. Cómo ya adelantó en la entrevista concedida a Diario LA RIOJA, la dirección ha optado por rescatar la figura de coordinador general. Cuevas seguirá así ostentado formalmente y de manera temporal la condición de número '2' del PP de La Rioja, pero será otra persona quien dirija el día a día del partido.

Se trata curiosamente del mismo escenario en el que el propio Carlos Cuevas fue coprotagonista en junio del 2003. El secretario general en aquel momento, Conrado Escobar, asumió responsabilidades institucionales en el Ayuntamiento de Logroño que le restaron capacidad para llevar la gestión interna de los populares. La formación nombró entonces para ello a Cuevas como coordinador general, lo cual supuso la antesala de su ascenso a número '2' tras el congreso regional de noviembre del 2004 donde Pedro Sanz fue reelegido presidente del partido por quinta vez consecutiva.

Si se reproduce el mismo esquema, el futuro coordinador general del PP de La Rioja podría convertirse en el segundo dentro de la jerarquía interna del partido tras el próximo congreso regional. Con una diferencia sustancial respecto a hace doce años: la Presidencia del partido y la del Gobierno riojano ya no recaen en una misma persona, los populares han perdido la mayoría absoluta y dependen de C's.

Las distintas circunstancias apuntan a que su nombre no saldrá del 'núcleo duro' de las actuales vicesecretarías, sino que se optará por una figura emergente de nuevo perfil: la de José Luis Pérez Pastor, senador desde las elecciones del 20D y que, a pesar de su juventud (Logroño, 1978), ya ha ocupado responsabilidades como director académico del IER, diputado regional o director general de Cultura en la última etapa de Pedro Sanz. En ese caso, compatibilizaría su tarea en la Cámara Alta con la de coordinador general.