Ocho de cada diez universitarios riojanos tiene empleo a los cuatro años de graduarse

Como nota más positiva y pese a la recesión económica, ocho de cada diez 'hijos' riojanos de aquella 'promoción' estaban trabajando en el 2014 (cinco puntos por encima de la media del país). El escenario era bien distinto para el 11,5% restante, que se encontraba en el desempleo (6,5 puntos menos que la tasa nacional, pero casi la mitad de los que no habían tenido acceso a un trabajo llevaba dos o más años buscando algo).

Entre el colectivo riojano afortunado también había sus pros y contras: el 75,5% disfrutaba de un empleo 'full time' (la rama de ingenierías casi hace pleno) pero el resto (el 24,5%) seguía con una jornada parcial cuatro años después de abandonar las aulas, sobre todo en carreras de Educación -alcanzaba el 54%- y de Salud y Servicios Sociales -38,5% a tiempo parcial-. Son algunos de los titulares que se infieren de la Encuesta de Inserción Laboral de los Titulados Universitarios del 2014, la primera investigación de estas características que lleva a cabo el INE, que viene a demostrar que aquellos que cuentan con estudios superiores resisten mejor en los ti empos duros, aunque sea en condiciones precarias.

Las carreras y la salida

Como en todo, hay carreras muy atractivas pero con escasa salida laboral y otras que dan el pase automático al mercado. En el caso de La Rioja los datos oficiales no hacen sino confirmar lo que casi todo el mundo intuye. Si la estadística la ponemos en consonancia con la población activa resulta que las mayores tasas de paro corresponden a los epígrafes de Servicios con el 30,1% y Salud y Servicios Sociales con el 20,9%. Y dentro de ellos, el INE señala Trabajo Social y Orientación (37,1%), Turismo y Hostelería (30,1%) y Humanidades (25,7%) como las ramas de conocimiento más castigadas.

Los titulados del 2010 con mayor tasa de empleo estudiaron Ciencias, con el 91,5%, Educación con 83,0% e Ingeniería, Industria y Construcción con el 80,7% (con Informática al 100%).

La mayoría de estos universitarios viven en España (96,1%) aunque es significativo que el 9,5% de los graduados riojanos en Turismo y Hostelería ha buscado su colocación en el extranjero así como el 5,2% de los que cursaron Arte y Humanidades (estos últimos precisamente son también los más 'viajeros' a nivel nacional junto a los de ingeniería, industria y construcción). Los egresados riojanos que cuatro años después estaban residiendo en el extranjero rozaban el 4%.

El informe del INE aborda también el tipo de jornada laboral y la situación profesional que en el 2014 tenían los que titularon en la promoción 2009/10. El 75,5% de ellos tenía una ocupación a tiempo completo, especialmente alto en ingeniería (94%), Administración y Gestión de Empresas y Derecho (86,6%) frente al 24,5% de personas cuya jornada se desarrollaba a tiempo parcial (dato que sube -recalca el INE- al 30,9% en el caso de las mujeres y se queda en el 15,1% en los varones). Y dentro de este apartado, los porcentajes más elevados se vuelven a recoger en Educación (54,3%) y Salud y Servicios Sociales (38,5%).

Ahora bien, respecto a la situación profesional cuatro años después de acabar la carrera menos de la mitad (45%) contaba con un contrato permanente y el 39,1% figuraba como asalariado con un contrato temporal (5,2 puntos más que la tasa nacional). La estadística oficial añade un par de apuntes más: el 5,1% de estos licenciados era empresario o trabajador independiente (la mitad que en el resto del país) y el 9,9% continuaba en prácticas, formación o como becario.

Trabajo y formación

Y ya con un trabajo bajo el brazo, el INE se pregunta si éste es acorde o no a lo que reza en el título universitario. Pues bien, en este apartado el 23% opina que su trabajo se circunscribe exclusivamente a su área de estudios; el porcentaje se eleva al 53,4% si se añaden trabajos de su propia titulación o bien alguna relacionada. Sin embargo, el 12,7% dice que es un área totalmente diferente. Y hay un 8,4% de graduados que considera que sería suficiente poseer la ESO o EGB para desarrollar su tarea. Pero para consuelo de todos, la mayoría opina que el título universitario le ha servido para encontrar trabajo (64%) frente a los que declaran lo contrario (36%). Es lo que afirman sobre todo los titulados de ciencias (85,4%), ingenierías (81,3%) y los de salud (76,7%).

La mayoría de los universitarios accedió a primer empleo con un contrato temporal (45,9%) o de prácticas o similar (17,8%) y a uno de cada cuatro (25,5%) le costó menos tres meses estrenarse en la faceta laboral. Hubo un 37,9% de personas que continuó al menos seis meses más en el trabajo que tenía mientras estudiaba (frente al 29% nacional).