Vallejo Balda dice que está «tranquilo y le tratan muy bien» en la Gendarmería vaticana

"¿No me ves?, estoy bien. Muy bien, aquí me tratan muy bien y me siento protegido", dijo a algunos de los ocho periodistas autorizados hoy a asistir a la primera vista del juicio.

El sacerdote, que fue secretario de la Comisión investigadora de los organismos económicos y administrativos de la Santa Sede (COSEA), de donde se filtraron la mayor parte de los documentos, explicó que conoció a su abogada esta misma mañana, en la apertura del proceso.

Lamentó haber tenido que cambiar tres abogados en tan sólo una semana.

"El Papa quiere que esto termine"

Se refería a que su abogada de confianza, Antonia Zaccaria, no ha sido autorizada a ejercer ante el Vaticano, mientras que la abogada que se le designó de oficio decidió retirarse a última hora dejando al sacerdote español sin defensa a 24 horas del proceso.

Vallejo explicó a los periodistas que "el papa quiere que esto termine lo antes posible" y añadió: "también yo", aunque en todo momento aseguró que no le importaba estar en las dependencias de la Gendarmería porque se le está tratando muy bien.

Evitar a la prensa

El sacerdote estuvo tranquilo durante la audiencia, dialogó con su nueva abogada, quien le aconsejó, al igual que un alto responsable de la Gendarmería vaticana, que evitase hablar con los periodistas.

Monseñor Vallejo llegó en un coche desde la Gendarmería, donde se encuentra arrestado desde el 1 de noviembre, y fue recibido por su abogada, con quien al terminar la vista se marchó para mantener una primera reunión.

La abogada que Vallejo había elegido para la fase de instrucción, Zaccaria, ha presentado una petición para poder ser autorizada a acompañar a su colega en el caso, pero aún no ha sido respondida.

Zaccaria explicó hoy a Efe que está intentando ponerse en contacto con la nueva abogado de Vallejo para entregarle la documentación en su haber.