Entre los escombros de Nepal

Entonces el joven tomó la decisión de quedarse en la zona para auxiliar a los más necesitados. Y eso está haciendo con otros amigos, como voluntarios independientes. Primero colaboró en busca de supervivientes y ahora está ayudando a personas que han quedado desamparadas tras el desastre.

En esos primeros días, mientras rescataban a la gente y se recuperaban cientos de cadáveres, la situación resultó caótica y continuaban los pequeños terremotos a lo que había que añadir intensas lluvias que dificultaban el trabajo.

Jordi nació en Gerona, se bautizó en Igea y mantiene un estrecho vínculo con la localidad de donde es su familia paterna y a la que acude siempre que puede para disfrutar con su cuadrilla de amigos en su peña, en verano, fines de semana o diferentes festividades. Se considera 'un igeano de sentimiento'.

Diario LA RIOJA habló con su padre, Inocente Arévalo, que estos días ha estado en Igea por las fiestas de la juventud y bajada de la Virgen del Villar. «Jordi cumplió 30 años allí el 23 de abril», explica. «Después del terremoto se puso en contacto con nosotros para decirnos que estaba bien. Mantenemos comunicación y nos informa de lo que ocurre y de lo que hace allí a través de Internet», agrega su padre.

El 29 de abril hizo el siguiente llamamiento en su página de Facebook: «Queridos amigos. Me gustaría difundir un mensaje de ayuda. Aquí en Nepal hay mucha gente que se ha quedado sin techo y la desorganización para la ayuda humanitaria es total. En vista de la situación hemos decidido de manera independiente comprar comida, agua y tiendas de campaña e ir a las aldeas devastadas ya que la situación se va a prolongar durante mucho tiempo. En la siguiente cuenta podéis hacer vuestra aportación por pequeña que sea y podéis estar bien seguros que va a llegar a la gente que lo necesita. ES34 1465 0150 52 1716590078. Muchas gracias».

El mensaje se ha difundido entre sus conocidos y en la página Facebook de Igea, donde ha tenido bastante repercusión. Tanto es así que en otro escrito de Jordi del 1 de mayo agradecía que en apenas dos días había recibido 2.500 euros de donativos y añadía que habían comprado las siguientes provisiones: «lonas para montar tiendas para unas 250 personas, mantas para 150 y ahora vamos a por más; 400 kg de arroz, 150 kg de dhaal y 150 kg chiwra (tipo de arroz que se come crudo). Hemos conseguido una pick up y en unas horas nos vamos para Mulpani».

Según nos cuenta su tío, José Antonio Campos, al final pudieron partir con más material y comida (1.000 kg de arroz, 200 de dhaal, 200 de chiwra, 100 mantas y tiendas para unas 400 personas). Regresó a la capital ayer y su objetivo es lograr más ayuda económica para seguir su labor.