La Consejería de Salud afronta la campaña antigripal con 65.000 vacunas

Ha insistido en que el objetivo de la campaña es reducir la incidencia de la gripe estacional y las complicaciones derivadas de su padecimiento en la salud de los riojanos mediante la vacunación de los grupos de personas de riesgo.

Ha señalado que los datos del Ministerio de Sanidad sobre la pasada campaña contra la gripe, relativos al grupo de población de mayor riesgo, formado por las personas mayores de 65 años, sitúan a La Rioja en el primer puesto de cobertura de vacunación, con un 66,4 %, frente a la media nacional del 56,4 %.

El Gobierno de La Rioja amplió la vacunación universal a un nuevo colectivo e incluyó a las personas de entre 60 y 64 años, con el fin de incrementar la protección frente a la gripe de un número mayor de riojanos, entre los que logró una cobertura del 26,16 %.

Nieto ha señalado que, en la campaña del año anterior, se aplicará una única vacuna para todos los colectivos, que es la antigripal de virus fraccionados e inactivados

La Consejería pretende alcanzar unos objetivos similares a los del año pasado, como son los de vacunar, al menos, al 65 % de la población de más de 65 años; aumentar la cobertura de vacunación en la población entre 60 y 64 años y alcanzar una cobertura de, por lo menos, el 90 % en las personas mayores de 60 años que están institucionalizadas.

También desea incrementar la cobertura vacunal en trabajadores sanitarios y en personas menores de 60 años que sufran alguna enfermedad crónica.

La "población diana" a la que se dirige esta campaña de vacunación antigripal se divide en cuatro grupos, como el de personas de edad igual o superior a 60 años, con especial énfasis en las que conviven en instituciones cerradas o que presenten alguna enfermedad crónica.

Las personas menores de 60 años que presentan un alto riesgo de complicaciones derivadas de la gripe; los niños y adultos con determinadas enfermedades crónicas; las que conviven en residencias, instituciones o en centros de enfermos crónicos y las mujeres embarazadas también son "población diana".

A ellas ha sumado las personas que pueden transmitir la gripe a aquellas que tienen un alto riesgo de presentar complicaciones, como los trabajadores de los centros sanitarios; así como las que trabajan en servicios públicos esenciales, como las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, bomberos, Protección Civil y docentes.

Nieto ha explicado que, para optimizar los recursos asignados a la campaña de vacunación antigripal, se pretende mejorar la cobertura del programa de vacunación antineumocócica al vacunar de forma simultánea frente a las dos enfermedades.

Sus datos indican que la vacunación de los grupos de riesgo puede evitar entre un 50 % y un 60 % de hospitalizaciones y el 80 % de los fallecimientos derivados de las complicaciones de la gripe.