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En las décadas de los 70 y los 80 el fotógrafo logroñés Antonio López Osés (1928-1999) recorrió el Camero Viejo para retratar paisajes, costumbres y tradiciones que hoy son un verdadero testimonio de lo que un día fueron aldeas entonces pobladas, hoy deshabitadas. Treinta ... años después Sergio Larrauri Redondo y David Antón Elías, en colaboración con José Ángel León García, José Ángel Díaz Marijuán y Blas Gonzalo Alfaro, han realizado un nuevo recorrido por La Rioja «menos poblada». Las imágenes obtenidas en ese viaje se pueden ver en la exposición 'Fotografía... que algo queda' en la galería de arte Aguado.
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«La despoblación y sus consecuencias no son algo contemporáneo. Ya a mediados del siglo XX la mayor parte de las regiones rurales, en especial las de montaña, habían comenzado un lento descenso demográfico, proceso que se acelerará desde los años 50 y 60 de la pasada centuria y que perdura hasta la actualidad», explican los responsables de la exposición. La consecuencia de esa despoblación provoca, exponen, «marginación, envejecimiento, vacíos demográficos, abandono o cambios en la gestión del medio, pérdida de patrimonio, pueblos fantasmas, escasez de servicios...».
Para revelar y rebelarse contra esto, diferentes integrantes de entidades como Rioxa Nostra, Jarcia Riojanista y TraperiadeKlaus han querido documentar esa «crisis de la despoblación en La Rioja desde perspectivas tan variadas como la sociología, el patrimonio inmueble, la imagen, el medioambiente o el patrimonio inmaterial». Y es que en muchos de esos municipios no solo se han perdido habitantes y, por lo tanto, memoria, también patrimonio cultural al derruirse ermitas, iglesias, monasterios, etc.
Qué 'Fotografía... que algo queda'.
Quién Sergio Larrauri Redondo y David Antón Elías, en colaboración con José Ángel León García, José Ángel Díaz Marijuán y Blas Gonzalo Alfaro.
Dónde galería de Arte Aguado (c/ San Antón, 12), en Logroño.
Cuándo hasta el 21 de febrero.
La exposición fotográfica cuenta con una treintena de imágenes en blanco y negro que pretenden «concienciar» y «dar voz a La Rioja menos poblada y conocida». Así, en la muestra se pueden contemplar fotografías actuales de aldeas despobladas como Antoñanzas, Santa Cecilia, Anguta, La Monjía, Oliván, Torremuña, Villanueva de Pazuengos, Canejá, Oteruelo... así como otras ya desaparecidas, como Las Ruedas de Enciso y el original Mansilla de la Sierra.
El recorrido de 'Fotografía... que algo queda' es amplio, no solo se fija en zonas tradicionalmente desfavorecidas, como las de los valles del Leza y del Jubera, también se fija en La Rioja Baja, el valle de Ocón y la Sierra de la Demanda. Además, el objetivo de las cámaras de esta exposición colectiva se ha fijado en localidades que, aunque sufran la despoblación, lo cierto es que resisten y así son retratadas en la muestra, caso de la aldea Santa Marina, o, incluso, la repoblada Peroblasco.
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