La UE advierte sobre la «erosión» del sistema político en Hong Kong

«Los disturbios pusieron de manifiesto profundas divisiones en la sociedad y causaron importantes daños sociales y económicos. La UE ha enfatizado que toda violencia es inaceptable y que la acción de las fuerzas del orden debe ser proporcional», indica la CE en un informe sobre la situación política del territorio durante 2019.

También apunta de manera directa a la entrada en vigor de la ley nacional de seguridad impuesta por Pekín, un elemento que «acentúa» el «malestar social y la violencia».

Para poner freno a la tendencia, el texto incide en la necesidad de una «desescalada» de la violencia basada en el diálogo entre las dos partes, realizando una «investigación exhaustiva de la violencia» surgida en los últimos meses.

El alto representante de la Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, afirmó que las instituciones comunitarias «no se quedarán al margen» mientras China «intenta recortar aún más las libertades» con una nueva ley de seguridad nacional «draconiana».

«Es de interés global que Hong Kong pueda prosperar como parte de China y como un centro internacional de negocios único y que supone un cruce de culturas basado en su alto grado de autonomía», concluyó el político español.

En la actualidad, más de 2.300 empresas europeas operan en el territorio autónomo, lo que representa una inversión anual de unos 136.000 millones de euros.

Esto supone que la UE es el segundo socio comercial de Hong Kong tras China, el segundo mayor destino para sus exportaciones y el tercer mayor proveedor a nivel global.

Estas relaciones, subraya el documento, hacen que ambas partes puedan beneficiarse de «los contactos intrapersonales», que ayudan a impulsar diversas áreas como «la investigación, la movilidad de estudiantes o la industria creativa»