Tsipras descarta un adelanto electoral siempre que consiga un «acuerdo viable» con los acreedores

El propio primer ministro reconoce que no será fácil llegar a un acuerdo satisfactorio con los acreedores, pero también cree que si hay una oferta sobre la mesa, aunque implique un "compromiso difícil", que dé un camino para que Grecia pueda salir de la crisis y dejar atrás el rescate, el deber del Gobierno será firmarlo, ha informado el diario griego 'Kathimerini' en su edición digital citando fuentes de Syriza.

Ante esta situación, los miembros del partido de Tsipras están esperando a conocer los términos de un posible acuerdo antes de posicionarse. "La reacción del partido dependerá de si el posible acuerdo incluye un compromiso sobre (el alivio de) la deuda", ha señalado un miembro del partido en declaraciones bajo condición de anonimato. "No basta con una referencia verbal vaga. Tiene que haber un compromiso firme con un calendario concreto y pasos intermedios", ha explicado.

La postura de Atenas es pues que no habrá acuerdo si no hay una quita. La mayoría de la deuda griega de 240.000 millones por los sucesivos rescates está en poder de Alemania, pero cualquier gesto sobre una posible condonación de la deuda posiblemente provocará un tremendo malestar entre la clase política germana.

Este sábado, el equipo griego ha viajado a Bruselas para presentar una contrapropuesta a la oferta presentada por los acreedores para desbloquear el siguiente tramo del préstamo.