En septiembre del año pasado, la cantante Taylor Swift hizo un llamamiento a través de sus redes sociales a que los jóvenes votaran en las elecciones presidenciales de 2024. Su publicación recibió 35.000 reacciones de fans. Muchos de ellos se registraron a través de ... la plataforma Vote.org para participar en estos comicios y sus votos podrían llegar a cambiar los resultados en estados como Texas, California, Nueva York y Florida, donde los resultados se deciden por un margen de cientos de papeletas. Visto el éxito de la superestrella para movilizar el voto joven, el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, pidió a Swift que haga lo mismo de cara a las próximas elecciones europeas, que se celebrarán entre el 6 y el 9 de junio -en España tendrán lugar el día 9-. Bruselas también podría tratar de replicar ese fenómeno con artistas comunitarios como Rosalía, el belga Stromae y los rockeros italianos Maneskin.
Aunque el Ejecutivo europeo no admite abiertamente estos contactos, una información del medio 'Euronews' desvela que Bruselas se habría puesto en contacto con artistas como Angèle, Rosalía, Stromae y Maneskin para que llamen a votar en las elecciones europeas. «Nadie puede movilizar el voto joven como los jóvenes, así es como funciona», resumió en rueda de prensa Schinas. La autora de 'Motomami' acumula en solitario 28,2 millones de seguidores en las redes sociales, por lo que una publicación suya podría replicar el 'fenómeno Swift'. Bruselas también baraja la posibilidad de captar a personalidades del mundo del deporte como atletas y futbolistas.
La autora de 'Motomami' acumula 28,2 millones de seguidores en sus redes sociales, lo que generaría un gran impacto
Cualquier esfuerzo es poco para impulsar el voto en unos comicios cuya participación ha ido cayendo sucesivamente a lo largo de los años. Los más recientes, celebrados en 2019, experimentaron un ligero incremento, gracias, precisamente, a los jóvenes. El 50,6% de los europeos acudieron a las urnas en esta cita electoral, el porcentaje más alto desde 1994.
Desconocimiento
La mayoría de los europeos es consciente de la importancia de estas elecciones y el 68% asegura que votará. Entonces, ¿por qué la participación sigue siendo tan baja? El Eurobarómetro publicado en otoño da pistas del por qué. Lo cierto es que existe un gran desconocimiento sobre la cita electoral. Como ejemplo, en España, seis de cada diez encuestados reconoce que no sabe cuando se celebrarán estos comicios.
La participación es crucial, ya que la victoria de la ultraderecha en varias elecciones nacionales -Italia, Países Bajos, Eslovaquia...- augura un nuevo auge de esta ideología en el viejo continente. De hecho, un informe elaborado por el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR, por su siglas en inglés) confirma que la ultraderecha antieuropea será la ganadora de esta cita electoral. Según este estudio, el apoyo a los grandes partidos tradicionales caerá y la coalición de extrema derecha Identidad y democracia (I&D) ganaría 40 escaños, desplazando el equilibrio de poder entre la izquierda y la derecha en la Eurocámara.
Un «despertar» político
Estos resultados pondrían en peligro la agenda política de la UE en materias como la lucha contra el cambio climático, el apoyo a Ucrania ante la agresión rusa y la aplicación del Estado de Derecho, entre otras. Para luchar contra esta tendencia populista, el coautor del informe, el profesor de la Universidad Europea de Florencia, Simon Hix, apunta que los partidos tradicionales tienen que «despertar» y «hacer un balance claro» de las demandas de los votantes. Asegura que sus campañas «deberían dar a los ciudadanos motivos para el optimismo» y hablar de los beneficios del multilateralismo y de una Europa más fuerte en el panorama internacional.
Un estudio revela que existen cinco tribus de votantes, según las crisis que más les han afectado, y que esto marca su voto
Se trata, en definitiva, de tocar las teclas adecuadas. Otro informe del ECFR muestra que existen cinco tipos de votantes, según las crisis que más les han afectado. Alemania -país que acogió a un millón de refugiados sirios en 2015- es el país más preocupado por la migración, lo que explica el auge de la formación populista Alternativa para Alemania (AfD) y un voto dirigido al centro-derecha y la ultraderecha. En los países más afectados por la crisis económica (Grecia, Portugal, Italia), la mayoría ejerce el 'voto protesta' y mantiene una posición antigubernamental. Más preocupadas por el cambio climático están Dinamarca y Suecia, donde gana el voto a los Verdes. En cambio, en los Estados miembros más afectados por el covid (España, Rumanía...) y por la guerra en Ucrania (Polonia, Estonia, Lituania...) son más favorables a partidos tradicionales.
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