Putin y Lukashenko realizan una demostración de fuerza con misiles nucleares

Desde el mar de Barents, el submarino atómico Karelia disparó un misil balístico intercontinental Sineva que alcanzó su objetivo en el polígono de pruebas de Kura, al norte de la península de Kamchatka. Además, navíos de las flotas rusas del Mar Negro y del Norte consiguieron impactar distintos blancos situados en tierra y mar con misiles de crucero Kalibr e hipersónicos Tsirkón.

La base de Kapustin Yar, en la región de Ástrajan, al este de Volgogrado, fue escenario del lanzamiento de un cohete de crucero 'Iskander'. Contra el polígono de Kura golpeó también un misil balístico intercontinental 'Yars' lanzado desde el cosmódromo de Plesetsk, al sur de la ciudad de Arjánguelsk.

Desde el aire, aviones de combate abrieron fuego con cohetes hipersónicos 'Kinzhal' mientras bombarderos estratégicos Tu-95MS lanzaban misiles de crucero. Todas las armas empleadas en esos ejercicios tienen capacidad para portar carga nuclear.

Las maniobras, que tenían por objetivo oficial «verificar la fiabilidad de las fuerzas nucleares», fueron supervisadas por Putin desde el centro de control del Ministerio de Defensa, acompañado por Lukashenko, y ambos escucharon las explicaciones de los generales del mando militar.

De forma simultánea, en otros puntos del país, junto a la frontera de Ucrania, en Bielorrusia y en varios océanos discurren también ejercicios con participación de la mayoría de las flotas y regiones militares rusas.

El servicio de prensa del Kremlin emitió al final de la jornada una nota calificando de «éxito» los disparos efectuados ayer con cohetes nucleares. «Bajo el mando del Comandante en Jefe Supremo de las Fuerzas Armadas, Vladimir Putin, se ha llevado a cabo un ejercicio planificado de las fuerzas de disuasión estratégica, durante el cual se lanzaron misiles balísticos y de crucero (…) las tareas se completaron en su totalidad y todos los misiles alcanzaron los objetivos designados».