Netanyahu desoye las protestas y avanza en su reforma judicial

Este lunes decenas de miles de personas se concentraron ante el Parlamento (Knesset) para expresar su oposición mientras los legisladores se preparaban para celebrar una votación inicial en la que Netanyahu y sus aliados, un grupo de legisladores ultrarreligiosos y ultranacionalistas, quieren sacar adelante un plan que, en su opinión, pretende arreglar un sistema que ha dado a los tribunales y a los asesores jurídicos del Gobierno demasiado peso en la elaboración de la legislación y en la toma de decisiones. Los críticos, por contra, afirman que el proyecto pondrá patas arriba el sistema de controles y equilibrios del país y concentrará el poder en manos del primer ministro. También dicen que Netanyahu, que está siendo juzgado por corrupción, tiene un conflicto de intereses.

La sesión fue conflictiva. Varios legisladores de la oposición fueron escoltados fuera de la sala por la seguridad por manifestar a gritos su contrariedad, mientras que un espectador fue sacado por los guardias de la tribuna de espectadores tras romper el cristal protector con rabia.

El enfrentamiento ha sumido a Israel en una de sus mayores crisis internas, agudizando la división entre los israelíes sobre el carácter de su Estado y los valores que creen que deben guiarlo.

La votación de este lunes es sólo la primera de las tres lecturas necesarias para la aprobación parlamentaria.