Israel ha detenido ya a 650 «terroristas» en Al-Shifa

Entre los detenidos figuran dos altos cargos de la Yihad Islámica y tres oficiales de la base de Hamás en Cisjordania cuya finalidad, según estas fuentes, consistía en organizar atentados contra el ejército. La agencia de seguridad Shin Bet señaló que los arrestados son los hermanos Hussem y Wissam Salameh. El primero comandaba la unidad de Inteligencia del grupo en la Franja mientras el segundo dirigía la brigada de propaganda.

Aparte de estos arrestos, las tropas israelíes asestaron otro golpe a la organización yihadista con el asesinato de uno de sus comandantes, Muhammad Hawashin, abatido en un bombardeo aéreo en Cisjordania, El ataque estuvo dirigido contra el coche en el que viajaba junto con otros cuatro agentes palestinos de la Yihad que tampoco sobrevivieron a la explosión. Tel Aviv aseguró que el comandante y otro de los dirigentes fallecidos intentaron enviar infructuosamente a un extremista suicida a Israel el pasado día 11.

Mientras continúa el asalto a Al-Shifa, donde los militares han encontrado armas y «documentos de Inteligencia», la presión internacional para detener temporalmente los combates sigue en aumento. Al debate, este jueves, en el seno de la Unión Europea para lograr una tregua humanitaria se agrega la iniciativa de Estados Unidos, que ha presentado ante el Consejo de Seguridad de la ONU una moción en la que reclama un «alto el fuego inmediato» en Gaza. Es el emplazamiento más severo de todos los que ha presentado Washington. Revela la extrema situación humanitaria de la población gazatí, pero también una aparente reacción a las recientes discrepancias entre el presidente Joe Biden y el primer ministro Benjamín Netanyahu.

Antony Blinken, secretario de Estado de EE UU, explicó que se trata de «enviar una fuerte señal» -la Casa Blanca venía vetando hasta ahora los acuerdos del Consejo- y advirtió que la tregua debe vincularse a la liberación de los rehenes capturados por Hamás. Se da la circunstancia de que el jefe del Mossad, David Barnea, regresa hoy a Catar para negociar la posible liberación.

En la misma declaración Blinken refrendó, como es habitual, el apoyo de EE UU a Israel, aunque Biden ha matizado que debe abstenerse de invadir Rafah sin antes poner a salvo a todos los civiles refugiados.

Las conversaciones coinciden con la publicación de la última encuesta del Palestinian Center for Policy and Survey Research de Ramala, en colaboración con el Konrad-Adenauer Stiftung, donde refleja que el 70% de los encuestados en Gaza y Cisjordania «está satisfecho con Hamás», frente al 27% que obtiene Fatah. La popularidad del presidente, Mahmud Abbás, se hunde hasta un 14% frente al 61% de Yahya Sinwar, líder islamista y cerebro de los ataques del 7 de octubre. El 84% de los encuestados reclama la dimisión de Abbás y el 65% califica la Autoridad Nacional Palestina (ANP) como «una carga para el pueblo». Además, casi el 80% de los habitantes de Gaza asegura que al menos uno de sus familiares ha resultado muerto o herido en esta guerra.