Israel activa la tecnología espía de Pegasus para intentar rescatar a los rehenes de Hamás

La empresa creadora de Pegasus es NSO Group, una firma creada por tres ingenieros informáticos que se habían formado en la unidad 8200, la sección del Ejército israelí especializada en el espionaje electrónico. Los expertos crearon su empresa en 2010 y dos años después ya tenían contratos millonarios en distintos lugares del mundo. Pegasus fue clasificado por Israel como un arma de guerra, dada la capacidad que tiene para intervenir conversaciones sin límites y en todo el mundo, y su venta a terceros países quedó en manos del Gobierno de Tel Aviv. De esa forma, la tecnología espía se convirtió en una herramienta diplomática de Israel. El acercamiento de Israel a países árabes llevado a cabo antes de la guerra incluía el intercambio de este tipo de productos y, según diversos medios, países como Marruecos, Arabia Saudí o Emiratos Árabes lo adquirieron.

El gran éxito de Pegasus frente a otros sistemas espía es que funciona con el 'zero click'. Este termino alude a que puede infectar un smartphone sin necesidad de que su propietario descuelgue al recibir una llamada o acepte algún tipo de transacción como descargarse una aplicación. Basta con que la agencia que utiliza Pegasus conozca el número de teléfono que desea vigilar para que, mediante este software, tenga acceso a sus llamadas, a sus mensajes y a todos los archivos que guarde en la memoria del móvil.

En el caso de Hamás, las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) saben que los terroristas se llevaron los móviles de sus víctimas porque en muchos casos fueron utilizados para llamar a sus familias o incluso para subir a las redes sociales de los secuestrados, o de los asesinados, imágenes crueles del 7 de octubre. No obstante, es muy atrevido pensar que Hamás sigue utilizando esos móviles o siquiera que continúan en su poder. Por eso, Pegasus está sirviendo también para controlar las llamadas de los sospechosos de ser miembros de Hamás. En ese terreno, la tecnología israelí está sirviendo para tener los teléfonos de los habitantes de Gaza, a los telefonea o envía mensajes para pedir la evacuación de las zonas de la franja antes de atacarlas.

Según Axios, NSO Group ha creado una sala de guerra con otras empresas tecnológicas israelíes para monitorizar la actividad de Hamás en el interior de la franja. Estos movimientos están marcados también por los intentos de la empresa tecnológica de que Estados Unidos les saque de las listas de empresas maliciosas con las que los servicios federales no deben realizar negocios. De la misma manera, Amnistía Internacional criticó a la firma ya que su invento estaba siento utilizado supuestamente para vigilar a disidentes por parte de gobiernos no democráticos. Los creadores de Pegasus vieron como su volumen de negocios comenzaba a reducirse por las distintas polémicas en las que estaba envuelto su software. Por ello, comenzaron a iniciar una campaña de imagen con la que intentar hacer ver que su principal objetivo era ayudar a la lucha contra el terrorismo o el crimen organizado.