Dos ejecutados en Irán por «profanar» el Corán

En 2020, las autoridades descubrieron que Sadrolá Fazeli Zarei y Yusef Mehrdad habían difundido contenido contra el islam a través de un canal de Telegram. Incluso, habrían grabado un vídeo en el que Mehrdad prendía fuego a un Corán. Entonces, ambos fueron detenidos en las ciudades de Yasuj y Ardabil por coordinar la publicación de «imágenes vulgares» e «insultos a lo sagrado».

Un año después, Zarei confesó sus actividades ante un tribunal y fue condenado a muerte junto a Mehrdad. Sin embargo, numerosas organizaciones civiles y no gubernamentales han denunciado que el reconocimiento de esta clase de delitos suelen estar vinculados con malos tratos o torturas, por lo que ponen en duda su validez.

Teherán ha endurecido la persecución de los detractores del islam en los últimos años. En su intento de cercar el cristianismo o el ateísmo, las autoridades ahorcaron a 582 personas en 2022, según un informe publicado en abril por las organizaciones no gubernamentales Iran Human Rights (IHR) y Juntos Contra la Pena de Muerte (ECPM). La cifra del anterior año superó un 75% la de 2021 y fue la más alta desde 2015. Irán es el segundo país que ejecuta a más personas detrás de China, según varias organizaciones, entre ellas Amnistía Internacional.