EE UU y sus aliados critican a Irán por elevar el riesgo de proliferación nuclear

En un comunicado conjunto, los Gobiernos de los cuatro países sostiene que el cambio «es incompatible» con las obligaciones asumidas por Irán en virtud del Tratado de no proliferación nuclear, recordando que la producción de uranio altamente enriquecido entraña importantes riesgos. La OIEA, agencia de la ONU encargada de verificar el carácter pacífico de las actividades nucleares, llamó la atención de Teherán el miércoles tras observar un cambio en su modo de operar para enriquecer uranio al 60% en la planta subterránea de Fordo, no señalado anteriormente. La agencia afirma haber «detectado durante una visita sorpresa el 21 de enero que dos cascadas de centrifugadoras estaban interconectadas de una manera sensiblemente diferente». Irán dijo que se trata de un «error» de un inspector del OIEA.

«Las afirmaciones de Irán son inadecuadas», responden en su comunicado Washington, París, Londres y Berlín. «Las acciones de Irán se juzgan en base a informes objetivos e imparciales del OIEA, no en base a sus presuntas intenciones», añadieron.Los países occidentales estiman que la modificación de las instalaciones iraníes es «incompatible con las obligaciones de Irán» y que «la falta de notificación previa comprometía la capacidad del OIEA para mantener una capacidad de detección rápida en cuanto a las instalaciones nucleares iraníes». Fordo es vigilado de cerca desde que Irán empezó a producir allí uranio enriquecido al 60% en noviembre de 2022, un umbral muy superior al de 3,67% fijado por el acuerdo de 2015 entre Teherán y las grandes potencias.