El Ejército sirio, a punto de tomar la ciudad de Alepo

El Ejército ha hecho su anuncio a través de un mensaje difundido por SMS, en el que no ha ofrecido más detalles.

No obstante, la agencia de noticias oficial siria, SANA, ha precisado que unidades militares avanzaron frente a "organizaciones terroristas takfiri" (musulmanas radicales) en el este de Alepo y "restauraron la seguridad y la estabilidad en el barrio de Al Sheij Said".

La agencia, que cita a una fuente castrense, ha agregado que los soldados, en cooperación con sus aliados, retomaron también los distritos de Al Shahadín, Karam al Afandi, Karam al Dada y Al Salhín, y que han alcanzado Yisr al Hach, Al Yalum, Bab al Maqam, Al Firdús, la ciudadela y Al Sahrif.

La fuente ha destacado que las fuerzas armadas están avanzando hacia los barrios de Al Kalasa, Bustán al Qasr y Suq al Hal, y están persiguiendo a los terroristas que han huido hacia Al Sukari, Al Ameriya y Al Ansari.

En el interior de los distritos asediados que siguen bajo poder opositor reina la desesperanza. "Hay muertos y heridos en las calles y debajo de los escombros, ahora mismo no hay nadie que los pueda salvar porque el bombardeo es intenso. Nuestra situación es dificilísima", ha explicado uno de los pocos médicos que permanecen allí, Mohamed Abu Rayeb.

El portavoz de la Defensa Civil en Alepo, Ibrahim Abu Leiz, cuyo organismo presta labores de asistencia en áreas fuera del dominio del Gobierno, ha asegurado que los también llamados "cascos blancos" prosiguen su labor pese a las crecientes dificultades.

"Ahora mismo solo hay cuatro barrios en poder de los rebeldes", ha indicado Abu Leiz, quien ha informado de que los bombardeos son intensos, aunque no pudo precisar una cifra de víctimas.

SANA ha subrayado que ocho personas perecieron y otras 47 resultaron heridas por el impacto de cohetes disparados por grupos "terroristas" sobre barrios controlados por el ejército, como Al Idaa, Bab al Farach, Maisalún, Al Mashatiya, Seif al Daula, Al Maadi, Al Marye y Al Mugair.

Los propios rebeldes reconocen que la situación es complicada para ellos, tras los últimos avances de los efectivos gubernamentales y después del fracaso de una iniciativa para facilitar la salida de los combatientes que permanecen atrapados.

El líder del Ejército Libre Sirio (ELS), el general Ahmed Berri, ha señalado vía telefónica que "los rusos y los estadounidenses discutieron ayer un comunicado, pero Rusia lo acabó rechazando y no alcanzaron ningún acuerdo".

Ahora mismo, "no hay negociaciones reales", ha resaltado el dirigente opositor, quien ha apuntado que los rebeldes "permanecerán en sus puestos hasta el último hombre".

Por su parte, el portavoz de la insurgente Agrupación Fastaqim, Omar Saqar, ha revelado que "Rusia puso sobre la mesa una iniciativa para la salida de los revolucionarios (de Alepo), pero luego la retiró".

En ese texto, que no se ha presentado oficialmente, se exigía la rendición de los insurgentes que quedan en la parte oriental de la población.

"Todos sabemos que los rusos son de poco fiar. Ahora mismo no hay ningún contacto", ha destacado Saqar.

Desde el 15 de noviembre, las fuerzas armadas sirias apoyadas por la aviación rusa desarrollan una ofensiva en el este de Alepo para expulsar a los grupos rebeldes e islámicos.

Desde esa fecha, al menos 1.073 civiles, insurgentes y efectivos y milicianos gubernamentales han perdido la vida en la ciudad por los bombardeos, los disparos de artillería, el lanzamiento de cohetes y los combates.

Entretanto, el flujo de desplazados desde los barrios asediados a otras partes de la urbe continúa.

Según SANA, al menos 3.500 personas abandonaron en las últimas horas áreas del este de Alepo controladas por "organizaciones terroristas" y se dirigieron a barrios en manos de las autoridades, que los han trasladado al centro de acogida temporal de Yibrín.