Las fuerzas de seguridad jordanas cierran la sede de los Hermanos Musulmanes

Las relaciones entre las autoridades jordanas y los Hermanos Musulmanes, cuyo brazo político Frente de Acción Islámica (FAI) es el principal partido de la oposición, son tensas desde hace años y se han agravado recientemente.

El dirigente Hamzeh Mansur, exsecretario general del FAI, ha señalado que la decisión es "lamentable" y "un paso extraño" dado que hasta ahora las autoridades no habían tomado medidas tan drásticas. El Ejecutivo jordano no se ha pronunciado todavía sobre este asunto, pero fuentes gubernamentales apuntan a que el Ministerio del Interior considera al grupo matriz de la Hermandad, liderado por Hamam Said, "no autorizado".

Otra sede clausurada

El cierre de la sede se produce después de que el movimiento islamista desafiara la prohibición de Interior de celebrar elecciones internas para elegir a un nuevo liderazgo, este mes de abril, y siguiera adelante con el proceso.

La de Ammán no es la primera sede de los Hermanos Musulmanes clausurada. El pasado febrero, el grupo opositor islamista ya denunció el cierre por las autoridades de su sede en la ciudad costera de Aqaba, en el sur del país. El portavoz oficial del grupo, Muaz Jawaldeh, dijo entonces a la prensa que la medida era "arbitraria", y contraria a la ley y la separación de poderes en Jordania.

También fue clausurada la sede en Aqaba del FAI, debido a la disputa entre la facción dirigida por Said y los disidentes liderados por Abdel Mayid Zuneibat. Estos últimos fundaron en marzo de 2015 una escisión del grupo bajo el nombre "La Sociedad de los Hermanos Musulmanes" y justificaron la creación de esta nueva fuerza para desvincularse de los Hermanos Musulmanes egipcios, considerados grupo terrorista por Egipto y otros países árabes.