Mueren la mujer embarazada y su bebé heridos en el ataque al hospital de Mariúpol

La mujer fue trasladada de urgencia a otro hospital cercano pero llegó con la pelvis aplastada y la cadera separada, según informó AP. El cirujano Timur Marin explicó que los médicos sacaron al bebé por cesárea, pero ya era tarde. «No mostraba signos de vida», lamentó el galeno. Por desgracia, la madre estaba consciente en ese trágico momento y afirmó no poder soportar tanto sufrimiento. «¡Mátenme ahora!», gritaba desesperada a los facultativos. Pese a los esfuerzos de los médicos, la fémina tampoco pudo superar la intervención y, tras treinta minutos de reanimación, también perdió la vida.

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Ander Azpiroz

El padre y el marido de la mujer recogieron este lunes ambos cadáveres. «Por lo menos alguien ha venido y no han acabado en la fosa común de la ciudad», comentaron los médicos. Sus muertes se suman así a las de otras tres personas, entre ellos una niña, que perecieron en el mismo momento del bombardeo al hospital de Mariúpol, que dejó también 17 heridos y que desató la condena internacional. El Kremlin negó la existencia de civiles en el ataque al centro sanitario, que afirmaron que estaba sin uso. No obstante, fuentes de la ONU aseguraron que sí estaba en funcionamiento en ese momento y que en él se encontraban mujeres y niños.

La guerra ha golpeado con crudeza a Ucrania, donde por el momento un total de noventa menores han perdido la vida y más de un centenar han resultado heridos, informó este lunes la Fiscalía General. La mayoría de estas víctimas han tenido lugar en las regiones de Kiev, Járkov, Donetsk, Chernígov, Sumy, Jersón, Mykolaiv y Zhitomir. La Organización Mundial de la Salud, por su parte, ha documentado al menos 31 ataques a instalaciones o equipos de atención médica desde que comenzó la ofensiva militar rusa. Según la ONU, «se espera que 80.000 mujeres ucranianas den a luz en los próximos tres meses, mientras que el oxígeno y los suministros médicos, incluso para el tratamiento e las complicaciones del embarazo, se están agotando peligrosamente».

Como resultado de los bombardeos, también han resultado dañadas 379 instituciones educativas, de las cuales 59 están totalmente destruidas, informó la Fiscalía General. El mayor impacto ha sido en Donetsk (119 instalaciones), aunque también se han visto afectadas otras ciudades como Mykolaiv (30), Sumy (28), Kiev (35) y Jersón (21).