Jimmy 'Barbecue' Cherizier, la pesadilla de Haití

Hace una semana más de 4.000 presos fueron liberados tras el asalto a dos cárceles en la capital, Puerto Principe, y el caos acabó trasladándose al aeropuerto, que fue tomado a tiros. El estado de emergencia y el toque de queda nocturno decretados por el Gobierno no han reducido la tensión, lo que ha llevado al primer ministro, Ariel Henry, a dimitir. Un hecho que constituía el principal objetivo de los ataques de las bandas criminales dirigidas por Jimmy Cherizier, un expolicía autoproclamado 'el liberador del pueblo haitiano'.

Al líder de los pandilleros, nacido hace 47 años en Puerto Príncipe, se le conoce como 'Barbecue'. Cuenta que porque su madre se dedicaba a la venta ambulante de comida, aunque la Policía desmonta esta versión y asegura que el mote obedece a su costumbre de quemar las casas y cadáveres de sus víctimas.

Hubo un tiempo en el que Cherizier trabajó en el otro lado, como policía de élite contra las bandas. Pero en una operación desarrollada en 2017 en el barrio Grand Ravine de la capital se vio involucrado, según el diario Le Figaro, en la muerte de nueve civiles. Fue entonces cuando surgieron las primeras dudas sobre su relación con los grupos criminales hasta que, finalmente, se convirtió en el portavoz de uno de ellos, la banda Delmas 6, a la que llegó, al parecer, gracias a favores de la Policía y del Gobierno del entonces presidente Jovenel Moïse.

La relación con el antiguo líder de Haití era estrecha, tanto que de manera pública apoyó su candidatura. Además, tanto la ONU como Estados Unidos sostienen que 'Barbecue' estuvo implicado en la alianza firmada entre la Policía y las bandas para matar a 71 personas en el barrio La Salinde de Puerto Príncipe, supuestamente para «reprimir la disidencia política».

El actual líder criminal haitiano fue expulsado del cuerpo y hasta se emitió una orden de captura en su contra, pero su cercanía a la clase política le libró de ser un objetivo real de la justicia. Él siempre se defendió y negó las acusaciones. «No soy un gángster, nunca lo seré. Es el sistema contra el que lucho. Tiene mucho dinero y el control de los medios. Ahora me hacen parecer como un pandillero», lamentaba. La unión con Moïse llegó a ser tan notoria que en 2020 promovió la unificación de nueve de las pandillas más importantes de Puerto Príncipe y formó la G-9 y Familia. Según el portal Insight Crime, la mitad de la financiación procedía del propio Ejecutivo.

Los problemas para Cherizier empezaron cuando el presidente fue asesinado, Ariel Henry se puso al frente del país y su financiación bajó un 30%. Desde entonces, el jefe de los pandilleros busca cambiar su reputación de criminal por la de revolucionario que lucha por la igualdad. «No se trata de que un pequeño grupo de ricos que viven en grandes hoteles decida el destino de los habitantes de los barrios populares. Debemos unirnos. O Haití se convierte en un paraíso para todos o en un infierno», defiende en su lucha contra los gobernantes del país, cuando antes él era uno de los que estorsionaba al pueblo caribeño para financiar los planes de su banda criminal.

Al igual que otros líderes que han experimentado una escalada vertiginosa, como Javier Milei en Argentina con la élite del país, Putin con la guerra de Ucrania o Netanyahu contra Hamás, 'Barbecue' ha sabido marcar un enemigo común, en este caso el Gobierno creado tras el magnicidio de Moïse, para hermanar a las pandillas en la causa y desatar el caos en el país caribeño. «Si la comunidad internacional sigue apoyando a Ariel Henry, nos dirigimos directamente a una guerra civil que acabará en genocidio», llegó a advertir.

El gran poder que Cherizier ha alcanzado con el paso de los años proviene en gran medida de las redes sociales, un medio que domina y con el que ejerce una fuerte influencia sobre los haitianos. De hecho, tan pronto como comenzó a cobrar fuerza entre las bandas criminales se lo hizo saber a la ciudadanía. Así, a través de YouTube comunicó la constitución del grupo de banda G-9 y Familia, y tras el asesinato de Moïse utilizó el mismo canal para pedir a la Policía que arrestase a Henry. Una cuenta que también ha empleado para informar sobre las acciones que llevan a cabo y lanzar sus discursos antigobierno.

Las redes sociales también han sido una buena herramienta para divulgar las ideas de las pandillas que dirige y reclutar adeptos. De ahí su agradecimiento «a quienes crean estas tecnologías», porque «nos brindan la oportunidad de acercarnos y presentarnos al público», celebra Cherizier, quien utiliza TikTok, Instagram y X para publicar videos en los que muestra los ataques realizados por las bandas y lanzar enérgicos llamamientos para tomar el país y destituir al actual Gobierno.

Cuando se trata de difundir las imágenes de las personas ejecutadas en las calles a manos de sus criminales prefiere WhatsApp. Y aunque en la actualidad, su actividad en las redes se ha visto suspendida como consecuencia de sus actos de guerra en Haití, sus seguidores promueven su palabra a través de sus propias cuentas para que la voz de su 'revolucionario' no desaparezca.