Exteriores pide a los ciudadanos españoles que consideren «seriamente» abandonar Ucrania

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, cifró el pasado 25 de enero, durante su comparecencia en el Congreso para informar de la crisis, en 534 los ciudadanos españoles que actualmente residen en Ucrania. La mayor parte, 440, reside en la capital, Kiev; otros 54 se encuentran en regiones fronterizas y 11 de ellos en zonas no controladas por el Gobierno ucraniano. En aquél momento aseguró que no se preveía «a nivel nacional ni a nivel europeo ninguna operación de evacuación». Pero la escalada de tensión hace más plausible ese escenario.

Desde Exteriores confirman que España está «preparada» para activar el dispositivo de evacuación en Ucrania al tiempo que piden mantener la calma. Por el momento, se está «analizando la situación» pero este dispositivo de evacuación está «listo» para ser activado «en caso de necesidad».

Este sábado, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha llamado por teléfono al líder del Partido Popular, Pablo Casado, para informarle de los últimos movimientos diplomáticos. «Le he reiterado el apoyo del Partido Popular para que el Gobierno cumpla con las responsabilidades de España en el marco de la OTAN y la UE», ha desvelado Casado en un tuit publicado posteriormente.

Sánchez también a mantenido una conversación con el Rey Felipe VI, a quien ha informado de las nuevas recomendaciones de viaje a Ucrania adoptadas este sábado. El presidente mantiene una comunicación constante con el Rey sobre esta cuestión. También ha informado a los socios de la coalición de Gobierno a través de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz. Por su parte, Albares va a informar a los portavoces de los grupos parlamentarios.

Sin embargo, pese a la gravedad de la situación, el Gobierno sigue apostando por la solución dialogada al conflicto. Este sábado, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha augurado que «tendrá éxito la vía diplomática» al tiempo que ha remarcado «la unidad entre todos los miembros de la OTAN», cohesión que ha calificado como «muy importante» ante «momentos difíciles».

El fantasma de una guerra hace que numerosos países occidentales recomienden a sus ciudadanos que salgan de Ucrania. Este sábado, Rusia también añadió preocupación al admitir que está reduciendo su personal diplomático en Kiev, aludiendo a las «provocaciones» ucranianas y de países occidentales.

En medio de esta alarma general, la diplomacia se intensifica este fin semana. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mantendrá una conversación este sábado con su homólogo ruso Vladimir Putin, después de que el viernes sus respectivos jefes de Estado Mayor mantuvieran una conversación. También está prevista una llamada entre el presidente ruso y el francés, Enmanuelle Macron.