Un vecino mata a tiros a una niña de 11 años y hiere gravemente a sus padres en Bretaña

La tragedia tuvo lugar cuando la familia, compuesta por una pareja británica de unos 40 años y sus dos hijas menores de edad, se encontraban en el jardín de su casa haciendo una barbacoa. Residían en Bretaña desde hace unos cuatro años, según la prensa local.

Su vecino, un jubilado neerlandés de 71 años, disparó con una carabina contra los cuatro miembros de la familia por razones que se desconocen, matando a Solenne, la niña de 11 años.

Sus padres, Adrien y Rachel Thournon, están gravemente heridos. El hombre ha recibido un disparo en la cabeza y su vida corre peligro. A la madre le alcanzaron dos tiros, uno en la cabeza y otro en la espalda. La otra hija de la pareja, de 8 años, resultó ilesa porque consiguió escapar a la casa de unos vecinos y fue la que dio la voz de alarma.

De momento, se desconocen los motivos de este drama, pero la fiscal de Quimper, Carine Halley, explicó que desde hace años había un conflicto entre los dos vecinos por una parcela colindante a sus dos propiedades. Según el diario local 'Le Télégramme', el presunto asesino, que también se había quejado del ruido, había amenazado anteriormente con un arma a sus vecinos.

Los gendarmes detuvieron al presunto asesino, que vivía en desde hace seis o siete años en Plonévez-du-Fau. Tras disparar contra sus vecinos, el neerlandés se atrincheró en su casa junto a su esposa. Un negociador de la gendarmería logró convencerlo para que se entregara.

La Fiscalía de Quimper anunció que ha abierto una investigación contra el vecino neerlandés por «homicidio voluntario sobre menor de 15 años» e «intentos de homicidio voluntario».