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Tres personas murieron este jueves en la ciudad holandesa de Rotterdam en un doble tiroteo perpetrado por un hombre de 32 años que atacó un edificio de apartamentos y un hospital universitario cercano. La Policía detalló que el sospechoso, que pudo ser arrestado poco después, ... era un antiguo estudiante del centro, si bien se desconocen por el momento las motivaciones que le llevaron a cometer la matanza.
El atacante, un individuo alto, de pelo negro, vestido con uniforme militar y cargado con una mochila, irrumpió primero en uno de los domicilios, a golpe de pistola, donde se cobró la vida de una mujer de 39 años e hirió gravemente a su hija adolescente, de 14 años, que falleció horas más tarde en el hospital. A continuación, prendió fuego al edificio y se trasladó al hospital universitario Erasmus MC de la ciudad portuaria holandesa, ubicado a un kilómetro de distancia, para cobrarse una tercera víctima, un profesor de 46 años, tal y como desveló anoche la cadena NOS, que añadió que en 2021 el sospechoso había sido condenado por maltrato animal.
Siguiendo el mismo guion, el hombre provocó también un incendio en el centro médico, lo que desató una ola de pánico entre los presentes. Vídeos publicados en las redes sociales mostraban en la tarde de este jueves a los agentes instruyendo a los estudiantes, algunos de ellos con batas médicas, para que huyeran del hospital mientras policías fuertemente armados se adentraban en el recinto. Otra secuencia mostraba al hombre esposado.
Las instalaciones del hospital fueron evacuadas parcialmente por las fuerzas de seguridad, que peinaron el inmueble hasta descartar la existencia de un segundo tirador. La Policía holandesa anunció anoche la apertura de una investigación para determinar los motivos del ataque. Asimismo, avanzaron que las primeras pesquisas indican que el hombre habría arrojado además un cóctel molotov en el centro médico. Este extremo lo confirmó un estudiante citado por RTL Nieuws, que fue testigo de los hechos: «Primero hubo un tiroteo en el cuarto piso. Hubo cuatro o cinco disparos. Después se arrojó una bomba incendiaria en el centro educativo».
El fiscal general, Hugo Hillenaar, se decantó, en cambio, por no ofrecer más detalles a los medios de comunicación al encontrarse en marcha las pesquisas. «No podemos decir nada sobre el motivo de este terrible acto en este momento. La investigación aún está en curso», declaró.
El doble ataque causó una profunda conmoción en Países Bajos. Uno de los primeros en mostrar este jueves su consternación fue el primer ministro, Mark Rutte.«Mi pensamiento está con las víctimas de la violencia, con sus seres queridos y con todas las personas que han pasado por este gran miedo», dijo en la red social X, anteriormente conocida como Twitter.
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