Muere Matteo Messina, el último capo histórico de la Cosa Nostra

Implicado en las grandes matanzas y atentados cometidos por la Cosa Nostra a principios de los años 90 para tratar de presionar al Estado para que colaborara con la mafia, además de en varias decenas de asesinatos, Messina Denaro no ha querido colaborar con la Justicia en estos ocho meses de reclusión ni tampoco ha mostrado el menor signo de arrepentimiento. «No quiero parecer un súper hombre ni tampoco un arrogante, pero me habéis cogido debido a mi enfermedad», les espetó a los miembros de la Fiscalía antimafia de Palermo en uno de los interrogatorios, en los que se negó a ofrecer nombres o informaciones que permitan arrojar luz sobre algunos de los delitos que ordenó.

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Conocido como 'Diabolik' por su pasión por un personaje de cómic llamado así, el 'capo' mafioso ha gozado estas últimas semanas de la compañía de su hija, Lorenza Alagna, nacida durante su período en la clandestinidad y que en un primer momento no quería tener relación con él. Luego la joven cambió de opinión y aceptó incluso los apellidos de su padre. No pudo verse en cambio Messina Denaro antes de fallecer con su hermana Rosalia, figura clave en su largo período en busca y captura, ya que se encuentra encarcelada por pertenencia a asociación mafiosa, entre otros delitos.

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Después de que se le practique la autopsia, el cadáver será trasladado a Castelvetrano, la localidad de la zona occidental de Sicilia donde su clan criminal tenía su bastión y en cuyo cementerio reposarán sus restos mortales. Enzo Alfano, el alcalde de Castelvetrano, consideró que el fallecimiento de Messina Denaro supone «el cierre de un capítulo» para la ciudad. «Fue un asesino que le hizo daño a su tierra, alejando a muchos empresarios que probablemente habrían creado puestos de trabajo. Ese hombre condicionó esta ciudad», señaló Alfano, recordando que la verdadera «liberación» de Castelvetrano vino con su arresto el pasado mes de enero.