La UE ultima un nuevo paquete de sanciones con el veto al oro ruso

«Moscú debe seguir pagando un alto precio por su agresión», dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. La reunión tratará asimismo la situación de Ucrania y cómo reforzar la respuesta coordinada desde la comunidad internacional, con la implicación de otros socios fuera de la UE. También se acordará invertir otros 500 millones de euros para comprar armas para que el Ejército de Kiev pueda combatir la ofensiva rusa.

La ayuda militar se trata en un momento en el que el Kremlin ha reforzado su ofensiva en el este del país. En las últimas horas los invasores han bombardeado distintas posiciones en Járkov, Mykolaiv y Donetsk. En el primer territorio, la segunda ciudad de Ucrania, el ataque tuvo lugar de madrugada. «Uno de los pisos de un complejo industrial de cinco plantas se incendió tras el impacto de misiles. Una mujer de 59 años resultó herida y está hospitalizada», explicó el gobernador de la región, Oleg Sinegubov.

En Mykolaiv denunciaron varios ataques. «Alrededor de diez poderosas explosiones tronaron. Por el momento tenemos información de un incendio en dos plantas industriales», advirtió el gobernador, Vitali Kim, quien añadió que las ciudades de Shevchenkove, Zoria y Novoruske también fueron bombardeadas. Tres personas murieron.

Infraestructuras civiles

En Donetsk, «los rusos siguen bombardeando las infraestructuras civiles», lamentó su gobernador, Pavlo Kirilen. Fallecieron tres civiles y una decena fueron heridos. Además, Moscú afirmó haber destruido un sistema de misiles de fabricación estadounidense, causando la muerte de 65 combatientes ucranianos. Ante la situación, una delegación de Estonia está analizando posibles crímenes de guerra cometidos por las tropas rusas.

Mientras, el presidente Volodimir Zelenski destituyó anoche de forma fulminante al jefe del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), Ivan Bakanov, y a la fiscal general del país, Irina Venediktova. En una comparecencia televisiva, el mandatario justificó la medida por la «traición» de unos 60 miembros de ambos departamentos que «permanecieron en los territorios ocupados por Rusia y colaboraron con los rusos».