Ucrania se garantiza el apoyo de Occidente

Ucrania sigue combatiendo con valor más de un año después del comienzo de la invasión por Rusia y los participantes en el también llamado 'Formato de Ramstein han apoyado a su Ejecutivo hasta ahora con más de 50.000 millones de euros para responder a la agresión ordenada por el presidente ruso, Vladímir Putin.

Al término de la cita, el titular germano de Defensa, Boris Pistorius, comentó que Ucrania ha recibido o está a punto de recibir más de setenta carros de combate Leopard 2 de fabricación alemana que han sido aportados por varios países europeos. Pistorius destacó que Berlín, Varsovia y Kiev han llegado a un acuerdo para levantar en la frontera ucraniano-polaca un complejo de mantenimiento y reparación de esos tanques que podría entrar en funcionamiento a finales de mayo.

Servirá para que los Leopard 2 en sus modernas versiones 2A6 y 2A4 «puedan ser puestos a punto o, de ser necesario, reparados» con rapidez, dijo el ministro alemán, quien se refirió a la inminente contraofensiva ucraniana y la próxima entrada en combate de esas armas. Pistorius señaló que ese centro de mantenimiento tendrá un coste anual de 150 a 200 millones de euros.

La información fue confirmada por el titular de Defensa de Kiev, Oleksi Reznikov, quien afirmó que este acuerdo preliminar «contribuirá al fortalecimiento de la cooperación y las capacidades de los defensores ucranianos». «Este 'puño blindado' formado por los esfuerzos de colaboración frustrará la agresión del régimen terrorista contra Europa y todo el mundo libre», añadió.

Austin destacó el nuevo paquete de ayuda militar de su país para las tropas ucranianas por valor de trescientos millones de dólares, que consistirá en munición para el moderno sistema de artillería Himars, granadas de 105 y 155 milímetros y minas anticarro, fundamentalmente. El secretario de Defensa estadounidense afirmó que el grupo de contacto está «más decidido y es más global» que nunca hasta ahora en su lucha contra «la agresión rusa».

La reunión en Ramstein, de la que no se filtra más que aquello que no se debe guardar en el más absoluto de los secretos, sirve para que la parte ucraniana exponga sus necesidades más urgentes y explique dónde tiene problemas de abastecimiento con el fin de que sus aliados occidentales contribuyan a resolver esos problemas, según explicó el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.

El máximo responsable de la Alianza Atlántica afirmó ante los medios que existe una postura unánime entre sus socios para permitir que Ucrania ingrese lo antes posible en la organización, aunque desde Berlín se subrayó que ese proceso llevará tiempo y antes debe resolverse el conflicto y garantizar para ello la permanente ayuda militar, financiera y humanitaria de sus aliados.

Con motivo de la reunión en suelo alemán el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, destacó que «más de 16.000 militares ucranianos han recibido hasta ahora adiestramiento» en distintos países europeos para el manejo de modernos sistemas de armas occidentales, desde los carros de combate Leopard I y II de fabricación alemana, a los poderosos sistemas antiaéreos estadounidenses Patriot.

Pero no todos los deseos de Kiev se cumplen. Austin rechazó de nuevo en rueda de prensa el suministro a Ucrania de cazas de fabricación estadounidense F-16. «Lo que Ucrania necesita con más urgencia son sistemas de defensa antiaérea con base en tierra», insistió el titular de Defensa norteamericano. Austin celebró la reciente entrega por parte de Alemania de un sistema Patriot y el segundo sistema germano Iris-T, decisivos para la defensa de Kiev ante los ataques con misiles y drones rusos.

Satisfecho de la reunión se mostró Resnikov. «Hemos tenido la ocasión de explicar a nuestros colegas cuál es la situación actual en Ucrania y que ayuda esperamos de nuestros socios», señaló en declaraciones a la cadena pública alemana de televisión ZDF. Resnikov destacó que el conflicto con Rusia se ha convertido «en una guerra de recursos» y que lamentablemente su Ejército consume más munición de artillería de la que Europa es capaz de producir actualmente.