Secciones
Servicios
Destacamos
Justo cuando el Gobierno de Giorgia Meloni es blanco de todo tipo de críticas por su gestión de las crisis migratorias del Mediterráneo, las propias autoridades italianas confirmaron anoche que treinta inmigrantes están desaparecidos después de que naufragara en la madrugada anterior en el Mediterráneo ... Central la embarcación con la que habían zarpado desde las costas libias para tratar de llegar a Italia. Según confirmó la Guardia Costera transalpina, otras diecisiete personas que iban a bordo de esa nave pudieron en cambio ser rescatadas por un carguero, que puso rumbo a Malta para desembarcar allí a dos de ellas por encontrarse en una situación grave de salud, mientras que el resto está previsto que sean acogidas en Italia. Varios buques continuaban anoche las operaciones de rescate en la zona del hundimiento con la esperanza de encontrar más supervivientes.
Al igual que el naufragio acaecido hace dos semanas frente a las costas calabresas, que deja 79 fallecidos con los nuevos cuerpos sin vida localizados este domingo, también este nuevo desastre podría haberse evitado. Según Alarm Phone, la organización que recoge las llamadas de auxilio de los inmigrantes en el Mediterráneo Central, la primera advertencia de que estaba en peligro esta nave cargada con 47 personas llegó a las 2.28 horas , pero ninguno de los países de la zona envió ayuda. Ya entonces los desplazados que iban a bordo pidieron socorro porque la barca iba a la deriva en medio de condiciones meteorológicas muy difíciles. «Retrasaron deliberadamente el rescate, dejándolos morir», denunció un portavoz de Alarm Phone.
Además, añadió que un mercante que estaba cerca del bote recibió orden de Italia de esperar a la Guardia Costera libia porque no estaban equipados para rescates, «pero la Guardia Costera libia no apareció».
Otra ONG, SEA Watch, también señaló que cuando llamaron «al centro de coordinación de rescates italiano para preguntar quién se haría cargo de la coordinación y asumiría la responsabilidad de esta gente, nos colgaron».
La Guardia Costera italiana explicó que la embarcación se encontraba en aguas donde la competencia para realizar las operaciones de socorro corresponde a Libia, que no actuó al no contar con patrulleras para enviar a la zona. Ante esta situación, el Centro Nacional de Coordinación de Socorro Marítimo de Roma mandó un mensaje de alarma a todas las naves que navegaban en los alrededores para que auxiliaran a los inmigrantes. Cuatro cargueros respondieron a la petición de alarma, aunque cuando llegaron al lugar del hundimiento sólo pudo rescatarse a diecisiete desplazados.
«Omisión de socorro»
Las organizaciones humanitarias que realizan salvamentos en el Mediterráneo Central reaccionaron con duras palabras a este enésimo desastre. «Una nueva omisión de socorro y una nueva tragedia», denunció Sea Watch. «Nadie ha intervenido en veinticuatro horas», criticó, por su parte, Mediterranea Saving Humans. Los inmigrantes, que se habían puesto en contacto telefónico con Alarm Phone, lamentaron que se les dejara solos «exhaustos y combatiendo contra el viento y las condiciones meteorológicas adversas».
En lo que llevamos de año han llegado a las costas italianas cerca de 18.000 desplazados, tres veces más que durante el mismo período del año anterior, según los datos del Ministerio del Interior. El flujo migratorio se ha acelerado estas últimas semanas, mostrando la dificultad para frenar este fenómeno que está encontrando el Gobierno de Giorgia Meloni más allá de las promesas de 'mano dura' que hacía cuando estaba en la oposición.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.