Rusia exige una capitulación de Ucrania para hablar sobre paz

Tanto Kiev como Moscú se han mantenido firmes en sus condiciones para poner fin al conflicto. Ambas partes piden la retirada de las fuerzas contrarias y el reconocimiento para sí mismos de las zonas ocupadas. Sin embargo, los dos gobiernos han insistido en que no lo harán. Es más, la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zájarova, aseguró este lunes que Volodímir Zelenski busca «prolongar» la guerra porque «todas sus peticiones constituyen un ultimátum sin sentido».

«Sólo la capitulación de Ucrania pondría fin a la guerra», aclaró Zajárova. Esta declaración sigue la línea de lo ya exigido en junio de 2022 por el Kremlin. «Hay que ordenar a los soldados ucranianos que depongan las armas y hay que aplicar todas las condiciones fijadas por Rusia. Todo acabará en un día», explicaba entonces el portavoz del presidente, Dmitri Peskov. Moscú, que no participó el pasado fin de semana en la cumbre de Arabia Saudí, pidió el reconocimiento de «la nueva realidad territorial», que habría empezado nueve años atrás en Zaporiyia, Jersón, Donetsk y Lugansk.

Mientras continuaba la resaca del encuentro diplomático, las fuerzas rusas bombardearon el domingo y este lunes el oeste de Ucrania. Ocho personas fallecieron y varias resultaron heridas. El gobernador de Jersón, Oleksander Prokudin, informó que una mujer de 59 años murió y entre los heridos se encuentran dos miembros de los equipos de rescate y otra mujer de 93 años. Prokudin señaló que las zonas residenciales del centro de la ciudad homónima fueron blanco de una treintena de ataques.

La oleada de misiles se cobró la vida de cinco vecinos de la localidad de Pokrovsk, situada en Donetsk, y otros dos en la ciudad de Kupiansk, en Járkov. Justo en ese área, Moscú asegura haber ganado territorio. El Ministerio de Defensa de Rusia comunicó este lunes que sus tropas han avanzado once kilómetros en dirección al frente de Kupiansk, que está bajo control de Kiev desde septiembre cuando lo recuperó del dominio ruso.

Ante este escenario, Zelenski solicitó «paciencia» frente al ritmo al que avanza la contraofensiva. «La operación es complicada y es posible que sea más lenta» de lo esperado, reconoció el mandatario. Sin embargo, celebró que 22 soldados ucranianos fueron liberados este lunes del cautiverio ruso. Aunque no se ha especificado los detalles de la entrega, esta situación constituiría uno más de los intercambios de prisioneros que Ucrania y Rusia suelen hacer.

Kiev también aseguró que había frustrado un atentado contra Zelenski. Según los servicios de seguridad, una mujer fue detenida este lunes tras ser acusada de haber ayudado a Moscú a planificar en junio un «ataque aéreo masivo» contra el mandatario cuando visitaba la región de Mikolaiv tras la voladura de la represa de Kajovka.