Rusia acusa a Telegram de ser «cada vez más» una «herramienta en manos de los terroristas»

En las horas posteriores al atentado, el Estado Islámico reinvindicó su autoría y, como prueba, difundió a través de Telegram vídeos grabados desde dentro de la sala la conciertos moscovita. Las escalofriantes imágenes de los asesinatos rebotaron en las cuatro esquinas del planeta.

«Esperaríamos más atención por parte de Pavel Durov», criticó Peskov. «Este recurso único y fenomenal desde el punto de vista tecnológico, que ha crecido ante los ojos de nuestra generación, está siendo utilizado con fines terroristas», insistió el portavoz del Kremlin. De momento, ha descartado que Rusia vaya a cerrar la aplicación.

Telegram ya estuvo bloqueada en este país entre abril de 2018 y julio de 2020, hasta que se adaptó a una nueva ley rusa que exigía que los proveedores de servicios de mensajería mantuvieran registros de los mensajes y el tráfico de sus clientes durante un tiempo mínimo en caso de que las autoridades necesitaran acceder a ellos.

No es sencillo frenar a una red social. Ni Vladímir Putin pudo con Telegram. El 13 de abril de 2018, el Tribunal del Distrito de Tagansky (Moscú) ordenó, basándose en la Ley Yarovaya (que obligaba a guardar las comunicaciones y sus claves de cifrado), restringir el acceso a Telegram en el territorio ruso. El bloqueo provocó interrupciones en el funcionamiento de muchos servicios de terceros, pero casi no afectó a la disponibilidad de Telegram en Rusia. Era como ponerle puertas al campo. Fue oficialmente desbloqueada el 19 de junio de 2020.

El Servicio Federal de Supervisión de las Telecomunicaciones de Rusia (Roskomnadzor) ha anunciado este jueves el bloqueo de un total de once canales de Telegram en los que, supuestamente, se habían anunciado nuevos ataques terroristas. «Hemos acelerado la identificación y verificación de los canales de esta plataforma. Se crean para intimidar a la población», ha subrayado el organismo.

El creador de Telegram, Durov, de 39 años y con una fortuna que la revista 'Forbes' estima en 15.500 millones de dólares, abandonó Rusia en 2014 y reside actualmente en Dubái, Emiratos Árabes Unidos. Nacido en Rusia, tiene nacionalidad emiratí, francesa y sancristobaleña (país de la Antillas).

En este contexto, las autoridades de Kirguistán (Asia Central) han alertado de que grupos terroristas reclutan personas a través de redes sociales y plataformas de mensajería instantánea, «como Telegram», para participar en «actos terroristas» en Rusia. Estas bandas tratan de alistar incluso a menores de edad para atentar en suelo ruso, según avisa el Ministerio de Trabajo, Seguridad Social y Migración de Kirguistán en un comunicado.

«Se observa que los reclutadores operan principalmente a través de sitios de citas, identifican a las víctimas analizando la correspondencia en varios grupos, en función de características religiosas, culturales, nacionales y otros rasgos sociales», explican. Las autoridades de Kirguistán han detectado que los grupos reclutadores se centran sobre todo en «personas vulnerables, deprimidas o que sufren alguna dificultad».