La rotura de una presa por las inundaciones obliga a evacuar a 500 personas en Eslovenia

Las intensas precipitaciones han causado las peores inundaciones en décadas en Eslovenia, con dos tercios del territorio afectados por las riadas y varias aldeas aisladas, y al menos cuatro muertos hasta ahora. Hay miles de personas sin electricidad ni agua potable y con la conexión telefónica y a internet limitada, y varios millares -en localidades como Mezice, Zgornja Sabinjska o Meziska- han tenido que abandonar sus casas. Los daños en viviendas, edificios, carreteras e infraestructuras energéticas se calcula, según las primeras evaluaciones, que superarán los 500 millones de euros.

La previsión meteorológica anuncia para este domingo una mejora del tiempo aunque continuarán las lluvias, eso sí, con chubascos esporádicos y tormentas sobre todo en el noroeste de Eslovenia. Se espera que en los próximas días comiencen las aguas de los ríos a volver a sus cauces y se puedan abrir carreteras y restablecer suministros básicos a la población afecta. El Gobierno esloveno ha anunciado una partida de 10 millones de euros para proporcionar ayuda humanitaria -a través de Cruz Roja y Cáritas- a los vecinos de las zonas dañadas y el refuerzo de los «equipos de protección y salvamento en un plazo máximo de tres meses».

El primer ministro, Robert Golob, ha pedido a la ciudadanía que «no subestime a la naturaleza» y que nadie «se exponga al peligro innecesariamente». Su Ejecutivo tiene intención, además, de solicitar ayuda internacional. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se solidarizó este sábado con «la devastación causada por las colosales inundaciones» en Eslovenia y prometió que la UE movilizará «apoyo según sea necesario».