T. Nieva
Martes, 17 de diciembre 2024, 19:08
Un austriaco de 65 años ha sido detenido en un puesto fronterizo en Croacia por llevar a una mujer muerta como pasajera cuando intentaba entrar en el país desde Bosnia. Según la Policía, el suceso tuvo lugar durante un control rutinario realizado a finales de ... noviembre en Gunja, municipio que se encuentra en la frontera.
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Los policías croatas se dieron cuenta de un detalle extraño al parar el vehículo. Su acompañante parecía estar sin «consciencia ni movimiento», por lo que llamaron a un médico para constatar su estado. Este último constató que la mujer, de 83 años y también austriaca, según su identificación, estaba muerta.
Falleció en Bosnia y él quería repatriar personalmente su cuerpo a Austria para «evitar las formalidades relacionadas con el transporte de un cadáver», precisaron los agentes. Se desconoce qué relación tenía el sospechoso con la fallecida, pero según la prensa croata, el hombre era su tutor legal. Al confirmarse que se encontraba sin vida, un servicio funerario público se hizo cargo del cuerpo.
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