Dos muertos y siete heridos por un apuñalamiento múltiple en un tren de Alemania

El homicida pudo ser neutralizado gracias a la valiente acción de un grupo de pasajeros que consiguieron reducirle hasta que la Policía llegó a Brokstedt para detenerlo. Las autoridades procedieron al cierre de la estación y sus alrededores para realizar las pesquisas y prestar asistencia a las víctimas. La operación provocó cancelaciones de trenes de larga distancia entre Hamburgo y Kiel, según informó Deutsche Bahn en su cuenta de Twitter, la principal empresa ferroviaria germana.

La ministra del Interior de Schleswig-Holstein, Sabine Sütterlin-Waack, confirmó el suceso, si bien optó por no dar detalles de lo ocurrido debido a que hay una investigación en curso. No obstante, fuentes de su departamento declararon al diario 'Bild', que el atacante era «un palestino apátrida», si bien inicialmente un portavoz de la Policía había informado de que se trataba de un ciudadano de origen sirio. De igual modo, el rotativo avanza que el hombre estaba señalado por los agentes por delitos violentos y de índole sexual.

Miembros de las fuerzas de seguridad relataron a medios locales que el perpetrador se autoinfligió heridas en las manos instantes antes de ser detenido. Por ese motivo tuvo que ser trasladado al hospital en Neumünster para ser posteriormente interrogado por los agentes. «Un viajero se apuñaló a sí mismo en el viaje de Kiel a Hamburgo en el expreso regional, hiriendo al menos a cinco personas y matando a dos», explicó al 'Bild' un portavoz de la Policía federal.

Nueve ambulancias, tres equipos médicos de emergencia y un helicóptero de rescate de Hamburgo fueron enviados a la estación de Brokstedt, donde los testigos describieron escenas de auténtico pánico. Algunos viajeros lanzaron maletas al atacante en un intento por salvar sus vidas. «Yo iba en primera clase. De repente, dos personas salieron corriendo. Agarré mis cosas y corrí tras ellos. Luego caminé por todo el tren, había entre cuatro y seis vagones y rastros de sangre por todas partes», relató a West Coast News uno de los pasajeros.

«La policía federal y estatal están trabajando en estrecha colaboración para investigar este caso», apuntó la ministra de Interior en un comunicado en el que manifestó que sus pensamientos están «con las familias y allegados de las víctimas». «Para mí está claro que el horrible acto es contra toda la humanidad», sentenció.

Las autoridades germanas se encuentran en alerta desde hace varios años a causa de la amenaza yihadista. Los temores se han visto multiplicados desde que en diciembre de 2016 tuvo lugar en Berlín el mayor atentado de su historia, cuando una docena de personas murieron atropelladas por un camión en un ataque reivindicado por el Estado Islámico.