El ministro de Defensa ruso visita el frente del Donbás en pleno asedio a Bajmut

Además, la oficina de prensa de Defensa publicó en Telegram fotos del ministro Shoigú condecorando a varios soldados rusos por sus actuaciones en combate.

Entretanto, continúan los fuertes enfrentamientos por el control de la ciudad de Bajmut, en la misma región de Donetsk, localidad en gran parte destruida, con escaso valor estratégico y en la que apenas quedan poco más de 4.000 habitantes de los 74.000 que llegó a tener, pero que asediada por tres frentes se ha convertido en un nuevo símbolo de la resistencia ucraniana ante el invasor.

A este respecto, y pese a que el jefe del grupo paramilitar ruso Wagner, Yevguéni Prigozhin, había afirmado el viernes que la ciudad estaba apunto de caer, el portavoz del ejército ucraniano, Serguii Cherevaty, en declaraciones a una cadena de televisión del país, aunque reconoció que «la situación en Bajmut es difícil», aseguró que estaba «bajo control». Asimismo, el jefe de las fuerzas especiales ucranianas, el general Viktor Jorenko, inspeccionó las tropas que defienden Bajmut, según anunció Kiev.

También en el frente del Donbás, el portavoz del Ejército ruso, el general Igor Konashenkov, informó de que al menos 490 soldados ucranianos habrían muerto o resultado heridos en los últimos combates en la región de Donetsk.

Por otra parte, la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, ha pedido a los Estados miembro de la Unión Europea que tengan muy en cuenta la posibilidad de enviar aviones de combate a Ucrania, como solicita el Gobierno de Kiev, a pesar de los recelos de varios países y aliados como Estados Unidos.

Durante su visita a la ciudad ucraniana de Leópolis y tras reunirse con el presidente Volodimir Zelenski, Metsola declaró que «los Estados miembro deberían considerar seriamente el envío de aviones de combate a Ucrania». Asimismo, la presidenta de la Eurocámara expresó su deseo de que 2023 sea el año en el que Ucrania pueda emprender las negociaciones formales de acceso a la UE, tras declararse «impresionada» por el ritmo de las reformas que Kiev está emprendiendo a solicitud de la Comisión Europea.