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El próximo canciller federal de Alemania, el conservador Friedrich Merz, ha anunciado este lunes su intención de suministrar a Ucrania los misiles alemanes de medio ... alcance Taurus, que el Gobierno de Kiev lleva demandando hace tiempo y que el jefe del Gobierno germano en funciones, el socialdemócrata Olaf Scholz, se ha negado hasta ahora a entregar al país agredido.
En declaraciones a la primera cadena de la televisión pública alemana ARD, Merz destacó que su nuevo Ejecutivo, que previsiblemente asumirá el poder el próximo 6 de mayo, suministrará esos poderosos misiles para que el ejército ucraniano pueda salir de la defensiva, aunque antes tiene intención de consultar a los aliados europeos.
Si continúan los bombardeos rusos contra objetivos civiles en Ucrania, esta debe poder contraatacar, por ejemplo «destruyendo la principal conexión terrestre entre Crimea y Rusia» , dijo Merz en la entrevista refiriéndose al puente que une la península arrebatada a Ucrania en 2014 con el territorio ruso y por el que Moscú envía una buena parte de sus refuerzos al frente.
Merz mantiene una postura absolutamente opuesta a la de Scholz en la polémica sobre los Taurus. El canciller federal saliente se ha negado sistemáticamente a enviar esos misiles a Ucrania con el argumento de que podrían ser disparados contra la retaguardia rusa y alcanzar incluso Moscú, implicando directamente a Alemania en el conflicto.
Scholz argumenta también que ese arma moderna solo podría ser utilizada por el ejército ucraniano con el apoyo directo y sobre el terreno de soldados alemanes por su complicado manejo, lo que supondría participar de manera activa en el conflicto. Por el contrario, Merz ha defiende desde hace años el envío de los Taurus para aumentar la capacidad ofensiva de Kiev.
Si el bombardeo de objetivos civiles en Ucrania por parte de Rusia no cesa, Alemania enviará esos misiles en cuanto cambie el Gobierno, advirtió Merz por última vez en octubre pasado. El ataque contra la ciudad ucraniana de Sumi con misiles balísticos que causó 34 muertos y más de 100 heridos entre la población civil local no ha hecho sino confirmar la determinación del próximo jefe del Ejecutivo.
La amenaza de Merz tuvo la reacción inmediata de Dimitri Medvedev, expresidente ruso y número dos del consejo nacional de seguridad de su país. «Piénsatelo dos veces, nazi», escribió Medvedev en su cuenta de X. Por el contrario, la iniciativa del político cristianodemócrata ha sido bien acogida por los ministros de Exteriores de la Unión Europea reunidos este lunes en Luxemburgo. El titular holandés, Caspar Veldkamp señaló que «se trata de una importante señal de lo que Europa está dispuesta a hacer».
También la jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, celebró el anuncio de Merz. «Tenemos que hacer más para que Ucrania pueda defenderse y que no sigan muriendo civiles», comentó la antigua primera ministra de Estonia. El titular de Exteriores polaco, Radoslaw Sikorski, señaló igualmente que la iniciativa del futuro canciller alemán le parece «muy bien».
Scholz criticó, sin embargo, la idea y calificó a Merz de «impetuoso». Su ministra de Exteriores, la verde Annalena Baerbock, comentó por su parte que «trabajaremos en ello». Los ecologistas llevan igual que los conservadores más de un año defendiendo el envío a Ucrania de esos misiles.
El Taurus es un misil tierra-aire de medio alcance germano-sueco que puede ser disparado con una gran precisión contra blancos situados a 500 kilómetros de distancia. Con un precio de un millón de euros por unidad, se dispara desde aviones de combate en pleno vuelo. Tiene una longitud de 5,1 metros y un peso de 1.360 kilogramos y vuela tan bajo que no puede ser detectado por los radares enemigos.
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