Kiev sufre el mayor ataque con drones desde la invasión

«¡El enemigo lanzó una cifra récord de drones contra Ucrania! El principal destino fue Kiev», declaró el comandante de las Fuerza Aéreas de Ucrania, el general Mykola Oleschuk, tras detallar que «71 de las 75» aeronaves pudieron ser derribadas. Pese a ello, el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, lamentó que cinco personas resultaron heridas, entre ellas un niño de once años. «Todos recibieron asistencia médica in situ o en el centro de traumatología, sin necesidad de hospitalización adicional», detalló mientras condenaba en su canal de Telegram a los «bárbaros rusos» por infligir a Kiev el «más numeroso bombardeo con drones» desde el comienzo de la guerra.

El Ministerio de Energía de Ucrania precisó que casi 200 edificios en la capital, incluidos 77 residenciales, quedaron sin electricidad durante varias horas como resultado del ataque. Asimismo, el alcalde de Kiev detalló que uno de los drones provocó un incendio en las instalaciones de una escuela infantil y daños en las ventanas de las viviendas vecinas. En otro edificio quedaron atrapadas dos mujeres en un quinto piso que finalmente pudieron ser rescatadas.

Las Fuerzas Armadas informaron de que aunque «el objetivo principal» del ataque ruso fue Kiev, la defensa aérea también fue llamada a actuar en el sur de Ucrania. Como resultado, un misil guiado fue destruido sobre la región central de Dnipropetrovsk.

Los bombardeos sin precedentes llevados a cabo por las tropas de Moscú con aviones no tripulados se produjeron precisamente el cuarto sábado de noviembre, cuando Kiev recuerda a las víctimas del Holodomor, como se le conoce al genocidio que en 1932-1933 acabó con la vida de entre cuatro y ocho millones de ucranianos por la gran hambruna causada por la URSS durante el proceso de colectivización de tierras. Una tragedia que, según los historiadores, fue promovida por el régimen de Stalin para aplastar las aspiraciones independentistas del país, que era entonces una república soviética.

«Más de 70 drones Shahed en la conmemoración de Holodomor. Los dirigentes rusos están orgullosos de su capacidad de matar», afirmó en sus redes sociales el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. El mandatario, que participó en una ceremonia en la capital, aseguró que es «imposible» olvidar o perdonar este oscuro capítulo del estalinismo y aprovechó para animar a la población a sobreponerse al «nuevo genocidio» ejecutado por Rusia, en alusión a la invasión.

«Seguimos trabajando para fortalecer nuestra defensa aérea», añadió Zelenski, convencido de la importancia de que los aliados occidentales no se olviden de su país cuando las miradas se dirigen al conflicto entre Israel y Hamás. De ese apoyo, como ha reiterado, dependerá que Kiev pueda afrontar una nueva fase crítica de la guerra con la llegada del invierno, sobre todo tras advertir el ejército la semana pasada que Moscú acumula ya más de 800 misiles para «desencadenar el terror» con ataques contra infraestructuras energéticas.