Ciotti pide ser primer ministro si Le Pen gana las legislativas en Francia

Le Pen se reserva para ocupar el Elíseo en 2027, cuando termine el mandato de Emmanuel Macron a no ser que éste dimitiera en caso de fuerte derrota de sus siglas. El presidente ha reiterado que no tiene previsto renunciar a su cargo.

Mientras, Ciotti ha presentado también este jueves un recurso ante los tribunales contra su expulsión de Los Republicanos después de que los barones de la formación conservadora rechazaran el pacto con la ultraderecha y aseguraran que se trataba de una iniciativa personal.

«Soy presidente del partido», aseguró este jueves Ciotti, a pesar de que la víspera el buró político de Los Republicanos decidió «por unanimidad su expulsión». Ciotti considera que los barones han violado los estatus de la formación y que es «jurídicamente víctima de un golpe de Estado».

A pesar de haber sido expulsado del partido, Ciotti acudió este jueves a la sede de Los Republicanos en París. El expresidente pudo entrar a su despacho sin que nadie se lo impidiera y se asomó a la ventana para le vieran bien los periodistas que se concentraban en la puerta.

Ciotti publicó en la red social X (antiguo Twitter) un vídeo en el que aparece sentándose en la mesa de su despacho en la sede de su expartido. La publicación, que lleva el logotipo de Los Republicanos, va acompañada de un mensaje: «Al trabajo por Francia».

El psicodrama que vive la derecha moderada desde que Ciotti propusiera una alianza con la ultraderecha continúa en ebullición. Los Republicanos han convocado este jueves un nuevo buró político «para validar» la expulsión de Ciotti del partido. El político de Niza considera que es una reunión ilegal.

En el otro lado del tablero político, las negociaciones entre los partidos de la izquierda, aunque comenzaron con «tensión», terminaron en acuerdo sobre un programa común y el reparto de las candidaturas de cara a las legislativas, como confirmó el secretario nacional del Partido Comunista, Fabien Roussel. Según el diario 'Libération', existen diferentes opiniones sobre cuestiones de fondo como la guerra de Ucrania o la situación en Oriente Medio ante la negativa de algunos miembros de La Francia Insumisa a calificar de organización terrorista a Hamás. Pero al final hubo pacto.

El nuevo Frente Popular, la alianza de partidos de izquierdas, había llegado el miércoles a un preacuerdo sobre el reparto de las 577 circunscripciones de Francia entre ellos para tener más posibilidades de clasificarse para la segunda vuelta y frenar así a la extrema derecha: 229 candidaturas para La Francia Insumisa, 175 los socialistas, 92 los ecologistas y 50 los comunistas.

Las discusiones, sin embargo, se habían prolongado hasta la tarde de este jueves entre los partidos de izquierdas sobre el reparto de las candidaturas y el programa común con el que se presentarán a las elecciones. Aunque los socialistas habrían obtenido en el preacuerdo más circunscripciones que cuando las fuerzas políticas de izquierda se presentaron juntas a las legislativas de 2022 bajo la etiqueta Nupes, la formación consideraba que no eran suficientes. Exigía más candidatos suyos en más circunscripciones.

«Hay que elegir a los mejores», había señalado Roussel al considerar que a pesar de las tensiones un acuerdo sería posible, ya sea sobre un programa común o sobre una candidatura única en cada una de las circunscripciones para frenar a la extrema derecha.

En las elecciones europeas del 9 de junio el Partido Socialista fue la formación de izquierdas más votada. El PS quedó en tercer lugar, por detrás de Agrupación Nacional (extrema derecha) y el partido de Macron y por delante del resto de partidos de izquierdas.