El europeísta Plenkovic gana las elecciones en Croacia ante el prorruso Milanovic

En la anterior cita electoral, en julio de 2020, el HDZ de Plenkoviv logró la victoria con 66 asientos en el Sabor, el Parlamento formado por 151 diputados, después de reunir el 37,2 % de los sufragios. Milanovic y su Coalición Reiniciar (que incluía al SDP) se quedó con 41 diputados y el 24,8 % de los votos. Los conservadores del HDZ pactaron entonces una coalición con varias formaciones minoritarias, algo que tendrán que reeditar para seguir al frente del Ejecutivo. Ahora, tras esta nueva consulta a las urnas, el panorama político croata apenas sufre alteraciones de peso en la diferencia entre los dos grandes partidos, lo que supone una clara derrota para Milanovic (fue primer ministro entre 2011 y 2016).

Tras una áspera campaña electoral marcada por los casos de corrupción que han acompañado a la labor del Gobierno y con el eco cercano de la invasión rusa de Ucrania, estaban llamados a las urnas 3,7 millones de ciudadanos. Croacia, miembro de la Unión Europea y de la OTAN, tiene la tasa de inflación más alta de la eurozona, sufre escasez de mano de obra y, con un salario medio de 1.240 euros, es uno de los países más pobres de la UE.

Las elecciones ponían dos modelos en el escaparate electoral. Plenkovic, que dirige el Ejecutivo desde 2016, es un firme defensor de la postura mantenida por la UE y la Alianza Atlántica de apoyo económico y militar a Ucrania. En cambio, el presidente Milanovic ha dejado claro en varias ocasiones que se siente más próximo a los postulados de Rusia, como ya sucede con países como Hungría y Eslovaquia. Por eso, Europa miraba con atención los comicios croatas: en la UE no quieren que aumente la grieta interna prorrusa. Milanovic defiende que suministar armamento a Kiev sólo alargará el conflicto.

El ambiente político previo a las elecciones estaba muy crispado. La cita electoral fue convocada anticipadamente por el presidente y enmarcada en una jornada laboral que fue declarada festiva. Milanovic pretendía así que la participación se incrementase. Pese a que el papel político del presidente del país es prácticamente testimonial y, en teoría, neutral, decidió por sorpresa presentar su candidatura a primer ministro. Los jueces del Tribunal Constitucional dictaminaron que esa opción estaba fuera de la ley. Milanovic tuvo que renunciar a encabezar la lista de su formación y cedió el testigo al presidente del SDP, Peda Grbin, pero dejó claro que tomaría las riendas del Gobierno en el caso de victoria de su partido.

La maniobra electoral del presidente no ha tenido, como ya auguraban las encuestas, el resultado que pretendía. La Unión Demócrata Croata de Plenkovic se impuso en los comicios pese a la erosión que le han supuesto los casos de corrupción que han afectado a varios ministros.